Zapatero acepta explicar en el Congreso el futuro de la misión española en Afganistán

José Luis Rodríguez Zapatero aceptó ayer, tras negarse en reiteradas ocasiones, comparecer ante el pleno del Congreso para explicar la participación de las tropas españolas en la misión de Afganistán. Lo hará por vez primera desde que llegó a La Moncloa hace casi seis años y responde a las insistentes peticiones del líder del PP, Mariano Rajoy.

El presidente del Gobierno había rehuido hasta la fecha debatir sobre este asunto y solía encomendar la tarea al ministro de Defensa de turno.

«Voy a aceptar su petición». Zapatero sorprendió así a Rajoy y accedió a dar explicaciones sobre la naturaleza de la misión, el coste, la seguridad de las tropas y las perspectivas de futuro. Pero no concretó cuándo tendrá lugar esa comparecencia e, incluso, pidió paciencia debido a su apretada agenda. De todos modos, el anuncio fue acogido con tal satisfacción que al propio presidente del Congreso, José Bono, se le escapó un socarrón «así me gusta» cuando escuchó el 'sí' de Zapatero.

El jefe del Ejecutivo agradeció a Rajoy el apoyo de su partido a la política con respecto a Afganistán, lo que incluye el último aumento de 541 efectivos más (511 militares y 40 guardias civiles), que supondrá un desembolso adicional de cien millones de euros. La decisión fue aprobada ayer en la Comisión de Defensa de la Cámara con el único voto en contra de Izquierda Unida. Sin embargo, tuvo que escuchar las críticas del líder del PP por resistirse a reconocer que el contingente español está en un «escenario de guerra» y no en una misión de paz.

El nuevo contingente de militares llegará a Afganistán en marzo y coincidirá con la supresión de los últimos vehículos blindados BMR, según confirmó en el pleno del Congreso la ministra Carme Chacón. En los vetustos BMR viajaban precisamente los dos últimos soldados muertos en Afganistán. Estos blindados serán sustituidos por los Lince y RG-31, «vehículos con la mayor protección antiminas de los que ahora existen en el mercado», garantizó Chacón, que cifró en 321 millones de euros el gasto del Gobierno para adquirir 575 unidades.

La ministra detalló en la Comisión de Defensa el atentado que acabó con la vida del soldado John Felipe Romero Meneses el pasado 1 de febrero en Afganistán. Aseguró que el BMR en el que viajaba, que contaba con mejoras en su blindaje, pisó una mina que contaba con un sistema de iniciación basado en platos de presión. «Tenía 12 kilos (de explosivos) y era de elevada potencia y destrucción», señaló Chacón.

En su comparecencia, Carme Chacón apuntó que los nuevos soldados trabajarán sobre todo en formación, capacitación y adiestramiento del Ejército afgano. Agregó que España «va a contribuir de una forma más que notable a la formación» de dicho Ejército, y concretó que España formará «uno de cada 20» nuevos soldados afganos, hasta llegar a unos 2.000.