Conspiraciones

Durante la última semana he escuchado en varios foros y he leído en algún periódico, tanto locales como de tirada nacional, que existe una conspiración anglosajona para socavar la credibilidad de la capacidad económica de España y por consiguiente deteriorar la solvencia del crédito para financiar la deuda de nuestro país, todo con la vista puesta en desarbolar la economía de la llamada 'zona euro'. Me hace gracia que la noticia proceda del Gobierno, cuyos miembros quizá escucharan de sus padres o maestros que, en tiempos de Franco, en los años cincuenta (parece mentira, hace ya 60 años de esto), otra conspiración, entonces la llamaban judeomasónica, nos impedía ocupar la posición que nos correspondía dentro del contexto internacional. Aquello se acabó con la imposición de unas medidas drásticas que rompieron con algunas de las rentas de subsidio y las ayudas improductivas, que dieron paso a un ajuste laboral brutal y a una redefinición del espacio industrial. Es curioso que dos de los portavoces de la idea hayan sido José Blanco y Manuel Chaves. Quizá sea sólo coincidencia, pero mucho me temo que la única salida sea un nuevo plan Ullastres-Rodó. ¿Cederán los sindicatos parte de sus prebendas y subvenciones para contribuir al ahorro presupuestario? Lo dudo. Es el capital y los empresarios quienes deberán pagar la solución a la crisis, lo mismo que decía Pablo Iglesias.