La Audiencia Nacional juzgará 'el robo informático del siglo'

Actualizado: Guardar
Enviar noticia por correo electrónico

Fue un golpe perfecto. 'El robo informático del siglo', se llegó a publicar. Ocurrió entre el 19 y el 20 de febrero de 2013. Durante trece horas, un ataque mundial al sistema bancario supuso 34.000 retiradas de efectivo en cajeros automáticos de 23 países. El botín recaudado fue superior a los 30 millones de euros y los piratas informáticos, con altos niveles de vida, se las creían felices.

La operación a gran escala se llevó a cabo en España, Alemania, Canadá, Egipto, Emiratos Árabes, Estados Unidos, Italia, Japón, México, Pakistán, Reino Unido, Rumania, Rusia, Tailandia o Ucrania, entre otros países. Dos meses antes ya se había producido otro ataque global similar.

El primer golpe policial llegó en Estados Unidos, en mayo de 2013. Entonces, los servicios secretos remitieron a sus homólogos españoles información sobre la conexión nacional de la red criminal. Tras las pesquisas oportunas se localizaron los identificadores de los ordenadores desde donde se llevó a cabo el latrocinio y se detuvieron a nueve personas en Madrid.

Estas mismas personas, en la actualidad en prisión provisional, fueron procesadas esta semana por el Juzgado Central de Instrucción 6 de la Audiencia Nacional por varios delitos, entre ellos pertenencia a organización criminal, falsificación de tarjetas de crédito/débito, estafas continuadas y blanqueo de capitales, en distinto grado de participación.

Intrusos

De acuerdo con las investigaciones, los piratas informáticos aprovecharon una «intrusión» en la compañía estadounidense procesadora de pagos 'EnStage', ubicada en India y encargada de procesar las tarjetas prepago para el Banco de Muscat (Omán).

A raíz de la investigación puesta en marcha por el servicio secreto estadounidense se pudo identificar y desarticular a primeros de mayo de 2013 la célula encargada de realizar las operaciones en Nueva York, formada por ocho individuos, uno de los cuales habría sido asesinado en República Dominicana el 27 de abril.

En Madrid, los nueve acusados habrían realizado 446 retiradas de efectivo en cajeros ubicados en la Comunidad de Madrid entre las 22.14 horas del 19 de febrero y las 5.17 horas del día siguiente, de forma simultánea a las que se estaban realizando en otros puntos del planeta. Para ello usaron tarjetas de crédito «blancas» con los códigos copiados.

«Los componentes del grupo organizado son mayoritariamente de nacionalidad rumana, con contactos con hackers captadores de datos de tarjetas reales estadounidenses en su mayoría, que coordinadas previamente tiene todos un mismo propósito», señala el auto judicial del magistrado Eloy Velasco.

El juez añade que a lo largo de las pesquisas se ha podido constatar el alto nivel de vida de los investigados, así como que «la única actividad que se puede comprobar es la comisión de los hechos delictivos, los cuales les permiten tener medios de vida holgados para su estancia en España».