Jordi Alba (i), en el partido contra el Sevilla. / Alejandro García (EFE)
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Vuelve Puyol, se rompe Alba

El central jugó un partido de entrenamiento siete meses después y el lateral estará seis semanas más de baja y se pierde el clásico

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Carles Puyol volvió a jugar un partido casi siete meses después. No era oficial. Tampoco un amistoso. Sólo se trataba de un encuentro de entrenamiento en la Ciutat Esportiva azulgrana con ‘sparring’, el Sant Andreu del Grupo III de la Segunda B, pero al capitán le supo a gloria después de tanto tiempo de baja por culpa de una encadenación de intervenciones quirúrgicas en sus maltrechas rodillas. El central disputó 45 minutos de un partido a puerta cerrada que se había montado expresamente para que comprobara sus sensaciones y también para que el cuerpo técnico, con Tata Martino a la cabeza, analizara si ya puede contar con sus servicios.

A falta de que Puyol informara en las redes sociales sobre cómo se vio en el césped y debido a la escasa información facilitada por los medios de comunicación del club, hubo que recurrir a un ‘infiltrado’ ilustre. Julio Salinas, exinternacional del Barça, entre otros equipos, tuvo permiso para ver el encuentro porque su hermano, Patxi Salinas, ex de Athletic y Celta, es el actual entrenador del Sant Andreu. Y el exdelantero escribió en su Twitter: «Partido entre el Barça y el Sant Andreu. ¡Vaya instalaciones y césped! Dan ganas de jugar, pero lo mejor es ver a Puyol que ya está en forma».

Si Julio Salinas no se equivoca, el central recibirá el alta médica la próxima semana para estar disponible ya contra Osasuna. Otra buena noticia del partido fue Mascherano, quien también jugó unos minutos al lado de Puyol en el eje de la zaga. El central argentino sí confesó sus «buenas sensaciones» en las redes sociales, por lo que también podría reaparecer ante Osasuna después de tres semanas de baja.

La mala noticia la protagonizó Jordi Alba, quien sufrió en el entrenamiento una lesión muscular en el recto anterior de la pierna izquierda y tendrá que estar seis semanas más de baja que se suman a las cuatro que ya llevaba por una rotura fibrilar en el bíceps femoral de la pierna derecha. Se lesionó el 14 de septiembre y estaba a punto para reaparecer, pero ahora ha sufrido un percance en la otra pierna. Se perderá el clásico ante el Madrid, entre otras citas importantes.