FÚTBOL

La fuerza de Tito

El Barça, intocable en lo deportivo, recupera también su energía emocional con la presencia del técnico en los entrenamientos tras su operación

BARCELONA Actualizado: Guardar
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«Tu lucha será nuestra fuerza». La emotiva frase que Tito Vilanova dedicó a Eric Abidal en agosto en la presentación se ha convertido en una especie de ‘slogan’ de un Barça 2012-13 que aspira a todos los títulos. El director deportivo del club azulgrana, Andoni Zubizarreta, hizo suyo el mensaje el día que anunció la nueva operación quirúrgica del entrenador de Bellcaire de l’Empordà, antes de las vacaciones navideñas. Quiso parafrasearle, pero no recordó muy bien las palabras exactas y lo reconvirtió: «La fuerza de Tito es la fuerza de todos».

El Barça, intocable en lo deportivo, recupera también su energía emocional con la presencia del técnico en los entrenamientos tras su operación.

Sea como sea, el Barça, que acabó 2012 a tope en lo deportivo pero muy tocado en lo anímico por la enfermedad de Tito, comienza el 2013 rearmado emocionalmente, con el entrenador y Abidal participando otra vez en los entrenamientos. Son dos personas que luchan para superar sendos tumores y que van ganando la batalla. Su lucha y su fuerza es la de este Barça, sin duda. Dicho y hecho. Este jueves, tres altas médicas de golpe: Cesc Fàbregas, Adriano y Song. «Nos dan mucha fuerza, energía para seguir cada temporada consiguiendo éxitos y es el camino que nos marcamos. Celebramos esas incorporaciones, que estén bien y felices», explicó Víctor Valdés, citando a su técnico y a su compañero como ejemplos a seguir.

Cruyff, pitado en Cornellà

El portero, por cierto, garantizó su presencia en el derbi del domingo ante el Espanyol pese a que el miércoles se perdió por una fascitis plantar el amistoso que la selección de Cataluña empató ante Nigeria (1-1) en Cornellà-El Prat. Por lo menos se salvó de vivir una situación que sus compañeros Puyol y Piqué vivieron de cerca sin saber qué cara poner: los silbidos a Johan Cruyff cuando comenzó el discurso de su despedida como seleccionador catalán en castellano. Los 27.000 espectadores que acudieron al encuentro lo hicieron con un ánimo reivindicativo e independentista dentro de un ambiente festivo, pero no perdonaron al holandés, que lleva casi 40 años en Cataluña sin atreverse a hablar ni una palabra en catalán.

El día de su presentación, en 2009, lo justificó: no quería destrozar otro idioma tras las patadas constantes que le da al diccionario de la lengua española y al de inglés. Y dicen sus compatriotas que hasta su holandés es muy complicado, repleto de extrañas construcciones y palabras que solo conoce él. Pero los defensores de la soberanía de Cataluña no tragaron más y mostraron públicamente su disconformidad con un hombre que ha sido más un reclamo publicitario internacional de la petición de una selección propia por parte de Cataluña que un seleccionador de fútbol. Tres años y cuatro partidos navideños después (4-2 a Argentina en 2009, 4-0 a Honduras en 2010, 0-0 con Túnez en 2011 y 1-1 con Nigeria en 2012), se acabó el show de Cruyff. Ahora vuelve el del Barça, afortunadamente con Tito Vilanova en el banquillo. La política queda a un lado. Llega otra vez el fútbol con toda su fuerza, la que transmiten Tito y Abidal.