¿Las mujeres son de Facebook, los hombres son de Twitter?

Hace un tiempo alguien creó un grupo en Facebook con este nombre: ¿Los hombres son de Twitter, las mujeres son de Facebook? , cuya “razón social” rezaba: Las mujeres Necesitamos un "Muro", fotos, videos, y "Me gusta" para poder expresarnos, mientras que el hombre es feliz limitado en sus 140 caracteres”.

Las cosas parecían estar claras y bien apoyadas en los prejuicios de que las mujeres somos más dadas a la cháchara a dos bandas que al monólogo. También parecían sostenerse en las teorías sobre el cerebro masculino y femenino, que otorgan a las chicas más habilidad con las palabras y mayor capacidad de compartir emociones y sentimientos. Las mismas que dicen que ellos son mejores orientándose en el espacio y leyendo los mapas.

Total, que así de cómodos y apalancados estábamos con nuestros prejuicios hasta que un nuevo estudio ha llegado a desmontarnos la teoría. Resulta que una investigación de la Asociación Española de la Economía Digital ha comprobado que las mujeres ya son la mitad de los usuarios de Twitter (49%). Y esto ha ocurrido en los dos últimos años. En 2010 las chicas suponíamos un escaso 30% de los que se conectaban a Twitter.

Aunque ya se pueda hablar de un cambio de tendencia, otros estudios como el realizado por la agencia Port Novelli Iberia, con más de10.000 consumidores europeos, ha constatado que las mujeres eran más propensas a utilizar las redes sociales para “contactar con amigos, compañeros de trabajo, familiares y conocidos”. En resumen, para hacer vida social.

Los chicos, por su parte usaban más los servicios de geolocoalización, esos que sirven para decir dónde estás y con quién. Este estudio asegura que las mujeres protagonizan el 71% de la actividad fan de cada día, y tienen un 8% más de amigos en Facebook que los chicos.

Los "muros de las lamentaciones" de Zuckerberg

María E, 35 años y redactora de una conocida revista femenina es un buen ejemplo de cómo usamos las redes sociales las mujeres. María rompió su relación de cuatro años y fue a llorar a Facebook. El muro de Zuckerberg se convirtió en el muro de las lamentaciones. Nunca supe si el aludido era uno de sus amigos y estaba al tanto de semejante despliegue de medios, pero el resto, los que conocíamos o intuíamos los detalles de la ruptura, podíamos adivinar cada una de las fases del duelo por los post de María en Facebook. Creó grupos de damnificados, insultó veladamente -también lo hizo a la cara-, publicó canciones con dardos envenenados y fotos de ella misma quemando la noche de Barcelona, cuando todos sabíamos que se retorcía de dolor. Mientras tanto sus amigas la jaleaban y ponían a parir a los hombres, en general, como especie del género humano.

Dos años después, y con el tema superado, todo aquello le da risa. “¿Preguntas que si me arrepiento? –me dice. “Pues creo que lo volvería a hacer. Nadie sabe la pasta que me he ahorrado en psicoanalista gracias a Facebook”.

Otra historia es la de Virginia M, 28 años, abandonada por su chico que prefirió a una coreana recién llegada a Madrid. Virginia contó toda la historia en su muro, dio detalles de las características físicas de la rival asiática, incluyendo las dimensiones de algunas partes de su anatomía. Le faltó colgar una foto. Su venganza no tenía límites, y contaba con un público morboso que se interesaba por ella, y también por el estado del ex bastardo. “Quizás no estuvo del todo bien – dice ahora con un año por medio, otra pareja y la certeza de que la historia de su ex con la coreana ha terminado-, pero no pude hacer otra cosa, necesitaba un sitio para desahogarme, y lo tuve”.

Otras chicas preguntadas han pasado su desamor también en Facebook aunque de modos más discretos, colgando canciones lacrimógenas, frases de filósofos sobre la fragilidad de los nexos humanos o, incluso, apoyando alguna causa justa, como la lucha contra el maltrato animal. Sea como sea, en Facebook encontraron una comunidad cómplice, dispuesta a poner “Me gusta” y a publicar comentarios, dos muestras de empatía y solidaridad que a estas alturas ya nadie se atreve a cuestionar.

No sé vosotros, pero yo no conozco a ningún chico que haya hecho ni la mitad de estas demostraciones de amor y odio en un muro de Facebook, exceptuando por supuesto los partidos importantes de fútbol. Siento caer una vez más en los estereotipos pero es lo que veo y cuentan los propios implicados.

La voz de la Red

Todo esto nunca podría haber pasado en Twitter, una red social menos pensada para el tú a tú -aunque lo hay-, y más diseñada, en mi opinión, para servir como altavoz de tus opiniones, de las cosas que te gustan y te disgustan. Así y todo hay que decir que las broncas de Twitter tienen gran resonancia, sobre todo cuando hay un famoso por medio.

Eso me contó @juanliverpool, autor del blog Twitterbroncas, que se define a sí mismo como editor de broncas que va cazando los mejores insultos dichos en Twitter, aunque también cualquiera que vea una bronca en la red social le puede avisar. Porque una de las prestaciones de Twitter es que no necesitas el permiso de nadie para ser su follower, lo que te da la posibilidad de insultar a casi cualquiera en este mundo. Si estás de suerte, igual te responden, y una bronca con un famoso es algo que da cierto prestigio y pedigree en las redes sociales.

ero esta característica de Twitter que la hace más abierta también impide la existencia de una comunidad que te arrope y llore contigo. En Twitter hay que mantener el tipo, hay que ser casi profesional. Facebook es como tu habitación llena de amigos (o cuasi) . Aquí les revelo la primera impresión que tuvo de Twitter una clásica de Facebook que ha pedido no ser identificada. Después de varios tuits que pasaron sin penas ni gloria, dijo: “Twitter es como tirar palabras en un inodoro cósmico, sin olor, color ni sabor”.

Así que la noticia de que las mujeres estemos alcanzando a los hombres en Twitter merece un estudio sociológico en toda regla. ¿Será que nos estamos pareciendo a los hombres?; ¿Será que nos estamos cansando de contar nuestras intimidades?; Será que estamos afectadas por la caída de Facebook en su estreno en bolsa y ya vaticinamos la burbuja 2.0? Si alguien conoce la respuesta a cualquiera de estas preguntas que lo diga y se quede satisfecho pues habrá hecho un gran aporte a la humanidad. De momento, lo que tengo bastante claro es que todos, hombres y mujeres, nos quedaremos al cabo de unos años con una sola red social, Facebook, Twitter, Pinterest, llamésmole X. No hay tiempo para mucho más y la vida es corta. (Más información en MujerHoy.com)