El interio de la Bolsa de Madrid. / Foto: Efe | Video: Atlas
MERCADOS | MADRID

En modo rescate

El selectivo español cae un 2,34% y pierde los 6.300 puntos | La prima de riesgo se mantiene en los 509 enteros

MADRID Actualizado: Guardar
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El selectivo español sufrió otro descalabro. El Ibex-35 retrocedió un 2,34% y dio un último cambio en los 6.251,70 puntos. Otro mínimo anual. Y profundiza en los niveles del año 2003. Aunque, en ese ejercicio los niveles más bajos se situaron en los 5.400 puntos. Posiblemente, en esa dirección camina el selectivo español. Dio igual que el resto de los índices europeos cerraran con avances: el Cac 40 francés ganó un 1,37%, el Dax alemán se apuntó un 1,16%, mientras que el Ftse 100 británico avanzó un 0,65%. Incluso el Ftse Mib de Milán terminó la sesión en verde: ganó un 0,38%. El único índice que acompañó al selectivo español en rojo fue el PSI-20 de Lisboa, que retrocedió algo más de un punto porcentual.

Los factores que animaron al resto de los índices del Viejo Continente no le sirvieron al Ibex. De nuevo, las "buenas" noticias sobre Grecia: el país se quedará en el euro, porque las elecciones las ganará Nueva Democracia, que podría gobernar con el PASOK, ambos comprometidos con las condiciones a cambio de las que Europa les concedió el segundo rescate.

El otro elemento (más flojo) que jugo a favor de las Bolsas europeas y del que el Ibex se mantuvo al margen vino de Estados Unidos y sus buenas referencias. O, al menos, la lectura que los inversores hicieron de los datos. Los del mercado inmobiliario apuntan a una estabilización de los precios. Lo malo es que el índice de confianza de los consumidores decepcionó, lo mismo que ocurrió con el índice de actividad manufacturera de la Fed de Dallas.

El tercer factor para el optimismo venía de China. Al final será el gigante asiático el que aminore el nuevo golpe financiero que se avecina. Ya lo hizo en 2008 y 2009. Con todo, los índices europeos mostraron un repunte a partir de la publicación de los índices inmobiliarios. Aunque no cerraron en los máximos de la sesión. Se redujo la subida, quizás, por esas dos últimas decepciones.

Y es que, además, está España. Las dudas que generan las comunidades autónomas y, sobre todo, el sistema financiero provocaron una caída del euro por debajo del nivel de 1,25 unidades. Como siempre, el euro, más que las Bolsas o incluso que la evolución de las primas de riesgo, es el principal termómetro del peligro que se respira en el ambiente. El agujero de Bankia siembra las dudas sobre el conjunto del sistema financiero. Y, más que nunca, resuenan las comparaciones con Irlanda: los problemas del sector financiero pueden provocar que España se vea abocada a un rescate.

Demasiada deuda en poco tiempo

Sigamos la lógica de Joaquín Maudos, profesor del IVIE. La inyección de Bankia supone un 2% del PIB. Pero si sumamos otros 30.000 millones para llegar a los 50.000 millones que se espera hagan todavía falta, el Estado incrementaría la deuda otro 3% del PIB. Y si sumamos la deuda autonómica, 35.000 millones de euros, elevaríamos el ratio en otro 3%. Sería un crecimiento demasiado rápido de la deuda estatal. Y el mercado no sería indiferente a él. No lo está siendo. Ayer, la agencia Egan Jones volvió a rebajar la calificación de la deuda española. Dos escalones. Hasta B. Es la segunda bajada de calificación de la deuda española en las dos últimas semanas. Y es importante porque suele ser el "indicador adelantado" de lo que hacen el resto de las agencias de calificación. De hecho, fue esto lo que hundió al euro.

Y si en junio el Estado tiene que refinanciar 9.000 millones de euros, en julio esta cifra alcanza los 19.000 millones de euros. ¿Tiene mucha capacidad de resistir España? En principio, no hay mecanismos, ni por parte del Fondo Monetario Internacional ni por parte del fondo de rescate europeo para ayudar directamente a la banca. Ambos otorgarían préstamos al Estado. Rescatarían al Estado para que, a su vez, ayude a los bancos. Y una operación así, según comenta Santiago Carbó, catedrático de Análisis Económico de la Universidad de Granada, sacaría a España de los mercados, es decir, perdería el acceso a la financiación mayorista. Por eso, este analista considera que lo mejor sería la creación de un FROB europeo. Evitaría o, al menos, reduciría el "estigma del rescatado".

Y, efectivamente, los que ayer volvieron a hundir al índice fueron las entidades financieras. El que más cayó fue Bankia, con un descenso del 16,25%. A continuación, el Sabadell, que retrocedió un 4,29%. Bankinter también se dejó más de un 4% y Popular, un 3,33%. BBVA y CaixaBank retroceieron alrededor de un 2,6%. Santander, por su parte, se dejó un 2,43%.

Repsol y su dividendo

Pero, además de los bancos, hubo otros valores muy castigados. Así, Repsol fue el segundo valor que más cayó, con un descenso del 7,17%, después de reconocer que no podrá mantener el dividendo. Sacyr Vallehermoso, como accionista de la petrolera, se dejó un 3,55%. Mediaset también se dejó más de un 4%. Entre los grandes valores, Iberdrola y Telefónica también sufrieron un fuerte castigo: se dejaron un 3,34% y un 2,91%, respectivamente.

En verde, sólo media docena de valores del Ibex. ArcelorMittal fue el que más ganó, con una revalorización del 3,76%, seguido de IAG, que avanzó un 3,68%. Acciona y Red Eléctrica se apuntaron un 0,41% y un 0,32%, respectivamente. Gamesa e Inditex completaron la lista de valores en verde, con subidas de un 0,20% y de un 0,12%, respectivamente. Entre los valores menos castigados, OHL, Ferrovial, Abengoa, Técnicas Reunidas, Amadeus, ACS, Acerinox y Grifols. Todos ellos cayeron menos de medio punto porcentual.

En el Mercado Continuo, sólo dos valores ganaron más que ArcelorMittal: San José y Service Point, que subieron más de un 5%. Y, en el otro lado de la tabla, tras Bankia, Solaria y la Seda de Barcelona, con caídas de más de un 8%, fueron los únicos que perdieron más que Repsol YPF.

En el mercado de deuda, la prima de riesgo de España cayó ligeramente: de los 511 hasta los 508 puntos básicos. También bajó la rentabilidad de los bonos a diez años: desde el 6,47% hasta el 6,44%. El interés del bono alemán se mantuvo en el entorno del 1,36%. En cambio, la prima de riesgo de la deuda italiana aumentó ligeramente desde los 437 hasta los 440 puntos básicos. El interés de su bono a diez años subió desde el 5,74% hasta el 5,76%.

Lo malo es que las primas de riesgo de los bonos a cinco y, sobre todo, a dos años subieron. En los segundo, en torno a quince puntos básicos en la sesión de ayer. Y, en el caso de España, el coste de los seguros contra el impago, los CDS's, marcaron un nuevo récord en los 560 puntos básicos.