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Manzano, sentenciado al frente del Atlético

Sobrevive por la falta de un sustituto idóneo y la proximidad del partido ante el Rennes

MADRID Actualizado: Guardar
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Gregorio Manzano quedó sentenciado como técnico del Atlético de Madrid tras la nueva debacle del equipo lejos de casa, aunque los problemas para encontrar un sustituto ideal, la proximidad del choque europeo del próximo jueves ante el Rennes, en la fase de grupos de la ‘Europa League’, y las dificultades de tesorería hacen que sobreviva en el cargo. El entrenador jienense quedó tocado tras el ridículo de los rojiblancos en San Mamés (3-0), en el alambre después de la debacle en Getafe, que remontó y le hizo tres tantos con un jugador menos, pendiente de un hilo tras caer en Copa ante el Albacete y agonizante cuando el Espanyol le endosó tres goles en menos de 20 minutos, en el último choque de Liga.

Tras 14 jornadas celebradas, el Atlético es el peor equipo de la Liga fuera de casa. Solo ha sido capaz de cosechar un empate, sin goles y ante el recién ascendido Granada. Le salvan los números en el Calderón, donde marcha invicto y solo cedió tres empates, contra Osasuna, Sevilla y Mallorca. El equipo, que comenzó con aspiraciones de acabar tercero o cuarto, deambula perdido por la mitad de la tabla a diez puntos de la ‘Champions’ y solo cuatro por encima del descenso. A Manzano se le acusa de la falta de ambición de los jugadores, de constantes cambios en defensa y en el centro del campo, de no mostrar capacidad de reacción y del cisma abierto con Reyes, a punto de ser casi ‘regalado’ al Galatasaray con tal de que el club se ahorre su alta ficha de cuatro millones de euros. «No damos con la tecla», reconoció el entrenador, hundido, en los vestuario de Cornellá-El Prat. Minutos antes, el gerente y portavoz del club, Clemente Villaverde, confesó en la antesala del palco, a Canal+, que no podía confirmar si el técnico iba a seguir o no.

Miguel Ángel Gil, consejero delegado del club, y Enrique Cerezo, presidente, no creen en Manzano pero tampoco saben cuál es el momento adecuado para la destitución. En principio, el hecho de que ahora tengan lugar tres partidos consecutivos en casa, bastante asequibles, antes del parón navideño, aconsejarían esperar. El jueves llega el Rennes, frente al que vale un empate para certificar el liderato europeo, el domingo comparece el Betis y días después toca remontar en Copa frente al Albacete, primer Segunda B frente al que caen los ‘colchoneros’ desde la década de los setenta.

Por una vez, los dueños del club se han puesto de acuerdo en dejar la decisión en manos del director deportivo, José Luis Pérez Caminero, que comparte representante con Manzano y sus ayudantes, Baraja y Vizcaíno, en la figura de Manuel García Quilón. El exfutbolista internacional celebró este lunes una ‘minicumbre’ con el entrenador y los jugadores en las instalaciones del Cerro del Espino de Majadahonda, donde el equipo se ejercitó suavemente tras regresar a primera hora de la mañana desde Barcelona. A partir de ahí, solo silencio y rostros de preocupación.

Mientras tanto, los rumores sobre el posible sustituto se disparan. Luis Aragonés, vitoreado en cada partido por la afición, no gusta a los dirigentes ‘colchoneros’. Acabó enfrentado con la familia Gil y se le considera demasiado mayor para un proyecto así. El ‘Cholo’ Simeone entrenará algún día al Atlético pero ahora cuentan con él los tres candidatos a la presidencia del Racing de Avellaneda. Pantic cumple en el filial pero en el club consideran que se le podría quemar si se le asciende ya al primer equipo, y Rafa Benítez es un sueño muy complicado. Ya dijo que no en verano y su reto es dirigir a un equipo de altos vuelos, con aspiraciones de ‘Champions’. El ex de Valencia y Liverpool ambiciona entrenar al Chelsea, donde el portugués Vilas Boas está muy tocado. Los últimos rumores apuntan de nuevo a Luis Enrique, quien en verano prefirió a la Roma, donde ahora está muy cuestionado.