ARTE

Las 'constelaciones' de Muntadas llenan de preguntas el Reina Sofía

"Los artistas no tenemos ningún poder" asegura el reconocido creador catalán, que pone a prueba el compromiso del espectador en la muestra 'Entre/Between'

MADRID Actualizado: Guardar
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"Esta exposición no es una exposición". Parafraseando a René Magritte, Manuel Borja-Villel, director del Reina Sofía, quiere dejar muy claro que la muestra que su museo dedica a Antoni Muntadas (Barcelona, 1942) no cabe en el patrón de la retrospectiva, por mucho que lo parezca. Es cierto que revisa el grueso de la obra y la trayectoria de este activista conceptual, un fino e inteligente agitador, cuestionador de las formulaciones del arte y su percepción a lo largo de los últimas cuatro décadas.

Es también verdad que en la muestra 'Entre/Between' está casi todo Muntadas, pero en un estudiado desconcierto y sin orden cronológico. "La idea de retrospectiva limita los resultados y la obra de Muntadas es continua", anticipa Borja-Villlel.

Se ha cambiado así la cronología por la cosmología, para presentar mediante "constelaciones temáticas" la multifacética obra de Muntadas, que según el propio artista plantea "muchas más preguntas que respuestas" y propone al espectador argumentos para que las obtenga. No en vano, todo el proyecto expositivo gira en torno al lema de una de las más ambiciosas propuestas conceptuales de Muntadas: "Atención: la precepción implica el compromiso. Según Borja-Villel, en el universo de Muntadas "el proceso es más importante que el resultado", de modo que su obra "exige el compromiso del espectador, jugando con lo aparentemente privado en una dimensión pública". "Su obra no solo supone uno de los trabajos más relevantes de su tiempo, sino que es el reflejo mismo de esta época" sostuvo el director del Reina Sofía.

"Los artistas no tenemos ningún poder" advierte Muntadas, más que remiso a dar explicaciones sobre sus obras y sus intenciones.

"Todo lo que tengo que decir está a la vista del espectador" reitera como un mantra este pionero del arte conceptual, un adelantado en el uso del videoarte, la instalación o la experimentación, un explorador de sensaciones, sentimientos y conceptos para un trabajo ¿artístico? en el que se sirve de percepciones, sonidos, olores, reacciones y convenciones que somete al juicio del espectador.

"Cualquier explicación sería bla, bla, bla. Los artistas nos explicamos con la obra; de no ser así seríamos publicistas políticos" ironiza el reconocido creador. Su temprano traslado a Estados Unidos a mediados de los setenta del siglo pasado, y su sólida y ascendente trayectoria desde entonces han hecho de Muntadas, ganador aquí del premio Velázquez de las Artes Plásticas en 2009, uno del creadores españoles de más prestigio y reconocimiento internacional, junto al desaparecido Juan Muñoz.

Ser y parecer

Una obra reciente 'Mirar. Ver. Percibir' (2009) da una pista muy certera sobre las intenciones de Muntadas, que con cada obra establece diferencia entre estos tres conceptos, haciendo que nada parezca lo que es y nada sea lo que parece. El mismo Muntadas que hace "dialogar" el resplandor de un bombilla con el de una vela, o que sitúa al espectador ante una proyección de imágenes de ataúdes o ante la masa aplaudiendo masacres, le convierte en protagonista del día para 'mass media' o le sume en una oscura sala de reuniones

-'The board room', 1987- propia de una multinacional decorada con los retratos videoparlantes de algunos de los grande 'charlatanes' del tiempo que le ha tocado vivir, unas imágenes en las que se alternan líderes religiosos y políticos.

Dividida en nueve "constelaciones" y sin orden cronológico, la comisaria es la norteamericana Daina Augaitis, que con el título 'Entre/Between" quiere acentuar esa posición intermedia de un Muntadas "siempre desplazado" y "que no da soluciones, situándose siempre entre ellas, en los intersticios, sin dejar de plantear preguntas y obligando constantemente al espectador a preguntarse "qué estamos mirando".

Arranca su propuesta hace cuatro décadas, con los primeros pasos de Muntadas en el vídeo y sus explotaciones sobre los "subsentidos", el tacto, el olfato y el gusto para los que reivindica "las mismas oportunidades "que para los sentidos audiovisuales". A partir de ahí, mediante instalaciones, vídeos, intervenciones, fotoesculturas, propuestas multimedia, saltos en internet, publicaciones y documentos, pone a prueba todas las formas de expresión y percepción. Un indagación con múltiples herramientas en la que acuña concepciones como 'paisaje de los media', somete a escrutinio crítico esferas de poder político, religioso, social y mediáticos, la construcción del miedo o los estadios como espacios para los grandes espectáculos deportivos, sociales y musicales.

La muestra aborda también el concepto de archivo, crucial en la obra de Muntadas, y el lenguaje y las convenciones del mundo del arte, con una crítica instalación en la que solo muestras marcos vacíos, lienzos en blanco o monitores sin imágenes, cuestionando la superior importancia que se concede a menudo al continente sobre el contendido.

La muestra ocupa el grueso de la cuarta planta del edificio Sabatini, las sala de protocolo, y varias entreplantas de la escalera que une el decimonónico edifico del hospital con la muy tecnológica ampliación de Jean Nouvel. Es ahí, en el territorio

intermedio y de paso, donde Muntadas ha querido instalar 'Situación 2011', su reflexión audiovisual sobre los museos de arte contemporáneo y sus ampliaciones, un hecho consustancial a estos centros en los últimos años. Una reflexión que inició en 1988 con otra instalación que abundaba en la antigua función como hospital de edificio que hoy alberga la colección estable del Reina Sofía.