Maite Aranalde, condenada a seis años de cárcel por asociación de malhechores

La presunta miembro de ETA Maite Aranalde Ijurco, detenida junto al jefe del 'aparato militar' de ETA en Francia, se dio a la fuga en junio del pasado año aprovechando que había sido puesta en libertad por la Audiencia Nacional. El juez Garzón revocó la medida pocos días más tarde, pero para entonces ya se había dado a la fuga.

Maite Aranalde fue extraditada el 25 de junio de 2009 desde Francia donde había sido condenada a seis años de cárcel por asociación de malhechores. La etarra estaba reclamada por el Juzgado central número 1 de la Audiencia Nacional por terrorismo, pero quedó en libertad porque la documentación enviada por las autoridades galas no incluía el delito de estragos del que estaba acusada por la colocación de varias bombas.

Aranalde Ijurco, natural de la localidad guipuzcoana de Ibarra, donde nació en 1982, huyó a Francia por vez primera en 2002 y fue detenida en 2005 en una localidad cercana a Montpellier. La primera huida de Aranalde coincidió con la desarticulación por parte de la Guardia Civil, en septiembre de 2002, del 'comando Zelatun- Donosti' y la detención de la presunta miembro 'liberada" de ETA Oihane Bakedano Maiagarai, que estaba reorganizando una red de comandos entre Vizcaya y Guipúzcoa.

Ligada al 'comando Zelatun'

Según fuentes policiales, Maite Aranalde formaba parte de un grupo 'satélite' del 'comando Zelatun' junto con Jon Mintegiaga Oiarbide. Ambos, naturales de Guipúzcoa, estudiaban en el campus de Lejona de la UPV y fueron captados para constituir una célula dependiente de los 'liberados' del 'comando Zelatun'. Mintegiaga fue arrestado por la Guardia Civil el 1 de octubre de 2002, pero Aranalde no pudo ser localizada porque en esa fecha se encontraba de viaje por Andalucía con unas amigas. Desde entonces se la consideró huida.

El grupo 'satélite' del 'comando Zelatun' mantuvo varias reuniones con Oihane Bakedano y con otro 'liberado' de ETA, tanto en Guipúzcoa como en Vizcaya, pero no llegó a cometer ningún atentado. Los dos 'liberados' habían encargado a sus colaboradores que se ocuparan de buscar información de potenciales objetivos.

En marzo de 2005, la Policía gala la detuvo en un apartamento de Cap dïAdge, localidad próxima a Montpellier, junto a los también presuntos miembros de ETA Aymar Altuna Ijurco e Ignacio Arietaleanizbeaskoa Tellería. En junio de 2008, la justicia gala condenó a Maite Aranalde a seis años de prisión por asociación de malhechores con fines terroristas.