Mariano Rajoy , durante su intervención en la sesión de control al Gobierno. / Foto: Efe | Vídeo: Atlas
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Rajoy llama mentiroso a Zapatero por afirmar que la recesión ha quedado definitivamente atrás

El líder del PP acusa al presidente del Gobierno de hacer un "daño descomunal" a la economía

MADRID Actualizado: Guardar
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El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, ha insistido en que hay datos para pensar que se empieza "a dejar atrás la recesión" económica, una afirmación que no ha convencido al líder del PP, Mariano Rajoy, quien ha acusado al jefe del Ejecutivo de mentir con las cifras.

La credibilidad de Zapatero, según Rajoy, "ha tocado suelo" al no decir la verdad sobre datos como los ingresos o el déficit, y hacer con esta actitud un "daño descomunal" a la economía del país. Zapatero, por su parte, ha vuelto a insistir en que la posible tasa de paro del 20% en el primer trimestre será la más alta y empezará a bajar a partir del segundo, y ha apuntado que es "posible" que la economía haya crecido ya entre enero y marzo, aunque la recuperación del empleo, ha admitido, vaya a "ser más lenta".

Aluvión de datos negativos

El presidente y el líder del PP han vuelto a centrar en la economía su cara a cara semanal en la sesión de control del Congreso, en la que el líder de la oposición ha enumerado varios datos como la caída de la Bolsa, el aumento del déficit público y el del diferencial de la deuda pública con la alemana para justificar su ataque al presidente.

"Se le está acabando el tiempo para hacer lo que debe hacer", ha apuntado Rajoy al comienzo del debate, a lo que Zapatero ha respondido con cifras como la del primer aumento de los ingresos del Estado en dos años, la subida en marzo de las afiliaciones a la Seguridad Social, "que será mejor en abril" y en meses sucesivos o el incremento del consumo energético. El líder de los populares le ha reprochado en ese momento haber destacado un aumento de los ingresos públicos que sólo se ha debido al ajuste de las devoluciones. Pese a este ataque, el jefe del Ejecutivo se ha reafirmado en sus datos y ha pedido a Rajoy que los leyera bien en lugar de "tocar de oído" como hizo en su intervención.

El peor enemigo de la recuperación

Por su parte, la vicepresidenta segunda y ministra de Economía, Elena Salgado, ha dicho que en "momentos delicados" la oposición parece el peor enemigo de la recuperación, por lo que pedido "reflexión" al PP. Respondía así a una pregunta de la diputada del PP Soraya Sáenz de Santamaría sobre si se puede confiar en las medidas económicas del Gobierno que tiene, ha resaltado, las "peores cuotas de paro y déficit".

Salgado ha acusado al PP de no saber "interpretar los datos" y ha calificado al principal partido de la oposición de "eruditos a la violeta a los que Cadalso recomendaba siete lecciones para siete días a la semana para hablar de todo sin saber de nada". En este sentido, ha recordado que el Gobierno "tiene un plan" y que algunas medidas "incluso" las ha apoyado el PP. "Tenemos un plan que estamos cumpliendo", ha comentado, añadiendo que "aunque sea sin su ayuda vamos a salir de la crisis".

Sáenz de Santamaría ha recordado que el paro supera ya el 20% y ha acusado al presidente del Gobierno de decir "una vez más, la décima, que el paro bajará el mes que viene", por lo que ha preguntado si lo hará "por la ley de la gravedad" o porque el Ejecutivo "hará algo". Además, ha afirmado que España necesita instituciones fuertes y reformas, pero que el Gobierno ha demostrado que no "sabe dónde va" ni en materia de energía ni de reforma laboral, donde han "descubierto" el modelo alemán y después el "austríaco", del que el secretario de Estado de Economía, José Manuel Campa, ha dicho que "no tiene sentido".

La portavoz popular ha manifestado que España tiene "todos los ojos encima", los cuales ven un país donde empresarios y trabajadores luchan por sacarlo a flote, mientras que el Gobierno "naufraga". A su juicio, el Ejecutivo es "la verdadera prima de riesgo" de la economía española, y ha advertido de que "no somos Grecia", pero no basta con decirlo.