CRISIS POR EL CORONAVIRUS

La vendimia de los vecinos de Alcalá del Valle en Francia está en el aire

Incertidumbre entre el millar de temporeros de esta localidad serrana que partía hacía Perpiñán en verano

Temporeros de Alcalá del Valle en la expedición del pasado año FRANCIS JIMÉNEZ

Javier Rodríguez

Por estas fechas, cientos de familias de la localidad serrana de Alcalá del Valle hacían el petate, es decir, comenzaban a preparar ropas y enseres en las maletas para viajar a la vendimia francesa . Es una tradición que se repite cada año y que ha pasado incluso de padres a hijos para ganar un jornal que permita vivir en invierno con algo más de holgura.

Sin embargo, el impacto del coronavirus ha trastocado los planes de estos jornaleros gaditanos . Andrés Vaquero, es uno de los enlaces sindicales del sector agrícola en Alcalá que, por estas fechas, tramitaba los permisos de trabajo, pero la situación ha cambiado y, de momento, «no sabemos si este año podemos viajar a Perpiñán». Las primeras expediciones de temporeros salían a mediados de mayo para cubrir la temporada del melocotón y la nectarina , aunque las salidas más numerosas tenían lugar a partir de junio, donde se incorporaban muchos jóvenes para afrontar la campaña de recogida de la manzana .

La presencia de españoles en suelo galo duraba hasta finales de septiembre, pero muchos de los temporeros gaditanos enganchaban con la campaña de la recogida de la uva y regresaban a primeros de noviembre. El 90 por ciento de los vendimiadores gaditanos que acudían a Francia repetían al año siguiente, dependiendo del salario que recibe de la categoría profesional en la que hayan sido contratados (cortador, vaciador o porteador) y del departamento francés en el que trabajen. En todo caso, «nunca será inferior al salario mínimo interprofesional de crecimiento, que está fijado en 9,88 euros por hora», lo cual «contrasta con los 6,54 euros por hora de media que perciben en España».

La jornada laboral en Francia es de 35 horas semanales y que, al superarlas, se cobran horas extraordinarias. Así, las horas trabajadas que superen las 35 horas semanales mejoran en un 25 por ciento el salario, y las que superen las 43 horas semanales, lo hacen en un 50 por ciento. Otro reclamo lo constituyen las prestaciones familiares que se generan por cotizar en Francia. De momento, todo está en el aire. De hecho, según comenta Andrés Vaquero , los empresarios franceses han pedido garantías sanitarias a España en caso de que se apruebe definitivamente el trasvase de jornalero. Hasta Perpiñán ha llegado la noticia del foco de coronavirus que se detectó en la residencia de ancianos de Alcalá del Valle.

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