Caos y crispación en el área de Urgencias del Puerta del Mar por el inicio de una obra

El inicio de una obra en el área de Urgencias del hospital Puerta del Mar ha provocado el caos en el servicio y, sobre todo, la crispación de pacientes y familiares. Los trabajos comenzaron hace dos días y consisten en una redistribución del espacio, lo que ha obligado a trasladar la sala de espera al vestíbulo del centro hospitalario. Las quejas de los usuarios no han tardado en aparecer y denuncian que esta ubicación no reúne las condiciones mínimas para aguardar el turno hasta que los pacientes son llamados a consulta por el equipo médico de guardia.

El protocolo de acceso no ha variado, sin embargo, la crispación llega cuando enfermos y acompañantes tienen que esperar cita, resultados y traslado a planta justo en mitad de una zona de paso.

No existe intimidad y, además, la temperatura en ese recinto es muy fría, sobre todo, por la noche.

LA VOZ informó el pasado verano de los planes del SAS para remodelar el servicio de Urgencias, que ya pasó por una profunda transformación hace ocho años. El objetivo no es otro que ampliar la sala de espera, que es la zona más frecuentada por los usuarios y se suele quedar pequeña en los momentos de mayor aglomeración de pacientes. Para ello se eliminarán dos aseos convencionales y una consulta. También se creará un nuevo baño para discapacitados físicos. Esta obra estaba prevista para el verano, sin embargo, se ha aplazó y se desarrolla ahora.

El sindicato Autonomía Obrera lamenta que esta actuación se lleve a cabo de golpe y no se haya orquestado, al menos, en dos fases. Pese a todo, estas obras no permitirán al hospital cumplir con el Plan de Urgencias anunciado hace un año por la anterior consejera de Salud, María José Sánchez Rubio. Uno de los requerimientos era garantizar una mayor intimidad en la sala de espera que debería permitir la separación de los pacientes por estado de gravedad, pero dadas las limitaciones estructurales del servicio resulta imposible por el momento.

A los trabajos de albañilería que se ejecutan en el área de Urgencias se suma también el retraso en la asignación de cama para los pacientes que son ingresados. LA VOZ ha podido comprobar como enfermos que entraron en Urgencias el miércoles de madrugada no ingresaron en planta hasta pasado el mediodía del jueves. Los sindicatos del centro hospitalario insisten en que el retraso es fruto de la falta de medios, la reducción de camas y la ausencia de personal. Desde Autonomía Obrera se ha puesto de manifiesto que la falta de camas en el hospital se ha convertido en un problema crónico. De hecho, todos los controles que se cerraron a finales de diciembre con motivo de las fiestas de Navidad y se encuentran de nuevo operativos, pero no se da a abasto. El sindicato denuncia que el centro ha pasado de tener 800 camas a contar ahora con 550, aproximadamente, «pero es mayor la demanda que la oferta».

Otro de los episodios de cierre de camas hospitalarias se vivió en el Puerta del Mar el pasado verano. En total se cerraron 138 en plena temporada estival. La medida afectó a Cirugía Vascular, Cirugía Maxilofacial y Ginecología, además de dos controles de Pediatría, y el área de Cardiología, Trauma B y Neumología.