Navarro se niega a dimitir y asegura que el hotel del Carranza se puede vender

El concejal de Hacienda del Ayuntamiento de Cádiz, David Navarro (PCSSP), asegura que no va a presentar «nunca» su dimisión a petición de la oposición, ha señalado que la petición realizada por el PSOE es «una salida de tono y un arrebato más» de los socialistas, y se ha mostrado «convencido, por las pistas de este último año», de que el hotel del Carranza «se puede vender».

Navarro califica la petición de reprobación y dimisión del PSOE como «una salida de tono y un arrebato más de su portavoz, Fran González», aunque destaca que «no sorprende viniendo de quien viene».

No obstante, el edil de Hacienda confirma que lo que le «sorprende es que el PSOE no ha pedido nunca en Pleno la reprobación ni la dimisión de las personas que han estado gestionando este Ayuntamiento y que hizo que tenga la situación que tiene, pero sin embargo la pide de la persona que está intentando restaurar esa situación».

La táctica del PSOE es «errónea»

Navarro ha manifestado que «llegará un momento en que el PSOE tendrá que darse cuenta de que la táctica que está usando es, cuanto menos, errónea y quizás le lleve también a desangrarse más electoralmente».

Por ello, añade que el PSOE «tendría que hacer un poco de autocrítica y ver que las últimas estrategias le han llevado a tener los resultados electorales más pobres, y si sigue por este camino se puede replantear ciertas situaciones».

«Ha presentado cuatro peticiones de dimisiones de concejales y en los últimos 20 años no presentó ninguna petición de reprobación o dimisión», recuerda.

El edil de Hacienda afirma que «el PSOE cuando hace declaraciones mezcla todo lo que pueda haber alrededor e intentan tirar contra alguien el resultado de la mezcla».

En cuanto a la venta del hotel del Carranza, Navarro ha explicado que ha finalizado el periodo de adjudicación directa y ahora se va a llevar una propuesta a Pleno para que Zona Franca ejecute ese convenio, «y si no, tendremos que buscar otro nuevo pliego».

No obstante, se muestra convencido de que el hotel «tiene opción de venderse». «Las pistas a lo largo de este año me dan el convencimiento de que se puede vender, y estoy convencido que se convertirá en un activo del barrio de La Laguna y que será un referente en cuanto al dinamismo en la actividad de la ciudad», concluye.