Cádiz

Un cambio legal obliga a 40 alumnos de Bachillerato Musical a cambiar de asignaturas o renunciar al curso

Los estudiantes ejercen esta opción en los cinco conservatorios de la provincia, obligados a reiniciar el curso en pleno febrero o abandonar, con el riesgo de perder un año por la modificación legislativa

Alumnos de la Casa de las Artes de Cádiz, que acoge los conservatorios en la capital gaditana. LA VOZ

J. L.

Alrededor de 40 alumnos de la provincia de Cádiz que realizan el Bachillerato de forma simultánea entre sus institutos y los cinco conservatorios gaditanos (Cádiz, dos, Jerez, La Línea y Algeciras) van a resultar directamente afectados por una modificación del curso que estudian y que, de forma sorprendente, va a ser aplicado en mitad del ejercicio académico 2021-2022, en vez de esperar a la pausa del verano.

La consecuencia directa es que esas cuatro decenas de estudiantes, los que cursan el Bachillerato Musical, han sido informados de que deben cambiar de modalidad . Caso de no hacerlo, según las asociaciones de padres denunciantes en la provincia y en las otras siete andaluzas, se arriesgan a perder el curso, a tener que repetirlo ya en otro formato de Bachillerato a partir de septiembre de 2023. Es decir, resumen los promotores de la denuncia, o cambian de plan a mitad de año académico o pierden el curso completo.

En toda la comunidad autónoma andaluza son 300 los alumnos afectados . Es un número muy bajo pero, recuerdan los padres, se arriegan a un notable perjuicio académico por una situación que no han creado, por un cambio legislativo que se les comunica en un momento de inexplicable inoportunidad, justo a mitad de curso.

La razón está en la nueva Ley de Educación, conocida como Lomloe, y el Real Decreto de 16 de noviembre, que la desarrolla parcialmente. Según los padres de los afectados, esta entrada en vigor supone «un hachazo para las enseñanzas de régimen especial de Música y Danza, ya que complica y mucho el llamado Bachillerato Musical. Éste consiste en un régimen especial que permite compatibilizar los estudios de bachillerato con los dos últimos cursos de las enseñanzas profesionales de música y de danza impartidas en los conservatorios».

Los alumnos acogidos a este régimen de simultaneidad, cursan en los institutos las asignaturas comunes del Bachillerato según su especialidad. Y en los conservatorios, la totalidad de las asignaturas de los ciclos profesionales de Música o de Danza, consiguiendo de este modo que su carga lectiva sea asumible y que puedan titular su Bachillerato .

«Esta modalidad, Bachillerato Musical, fue una realidad por primera vez en 1992 por la famosa Logse. Es una medida muy efectiva para facilitar la simultaneidad de las enseñanzas de régimen especial de Música o Danza con las de Bachillerato , aligerando las elevadas cargas lectivas que padece el alumnado que cursa ambas enseñanzas: se liberan de este modo doce horas semanales de carga lectiva de un Bachillerato convenciona», recuerdan los portavoces de los padres.

Sin embargo, el cambio legal aplicado en gran impacto porque obliga a los alumnos de este régimen de Bachillerato Musical, a cursar determinadas asignaturas nuevas en sustitución de otras en las que ya han superado la primera evaluación , y casi mediado el segundo trimestre de este curso 2021/2022.

«Una situación inviable»

Ante esta situación, según las asociaciones de padres, los alumnos se ven obligados a tomar una de las siguientes alternativas. En primer lugar, abandonar el régimen de simultaneidad de enseñanzas, para realizar el bachillerato de su opción completa con cinco asignaturas adicionales a las actuales, recuperando el trimestre pasado y la mitad de este segundo. « A todas luces imposible , ya que estos alumnos dedican al menos dos días a la semana a asistir a sus clases en el Conservatorio», aseguran los padres. Como segunda opción, estaría abandonar la modalidad que están cursando ahora y cambiarse a la modalidad de Artes. «Resulta inviable, pues en la gran mayoría de institutos no existe la nueva asignatura obligatoria que deben cursar: fundamentos del Arte I y II». Como tercera opción, quedaría matricularse en el IPEP para cursar online sólo esta asignatura: Fundamentos del Arte I y II.

Las familias afectadas afirman que «se genera así una situación de total indefensión del alumnado y de los centros educativos , a los que se les trasladan unos cambios organizativos y de reglas de juego a mitad del partido». Recuerdan que la situación puede suponer la pérdida de todo el curso, además de uno clave a la hora de acceder a carreras universitarias o ciclos formativos de grado superior. Por último, los padres alertan del riesgo de abandono de los estudios musicales en los que estos 40 alumnos gaditanos –a estas alturas de Bachillerato Musical- llevan invertidos ya más de 8 años de su vida.

Comentarios
0
Comparte esta noticia por correo electrónico

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Reporta un error en esta noticia

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Muchas gracias por tu participación