Pacheco: «¡Que no, que no se acuerda de 'ná'!»

El juicio sobre cómo se gestionaron las obras de la Casa del Rocío de la Hermandad de Jerez está dejando muchos gestos. Sobre todo los de Pedro Pacheco, que en la sesión de este martes se mostró bastante inquieto escuchando las palabras de quienes fueron sus compañeros en Urbanismo e incluso de gobierno, en el caso de Pilar Sánchez. «A parte de mentir es incompetente», decía al oír la declaración como testigo de Jaime Barrón, coordinador del área que intentaba explicar a las defensas cómo se desarrollaban ese tipo de subvenciones.

Sólo momentos antes, Pacheco había estado muy atento al sonido que llegaba desde la cárcel de Alcalá de Guadaíra. La 'amnesia' de Pilar Sánchez provocaba la reacción del exalcalde: «¡qué no, qué se acuerda de 'ná'!», decía por lo bajo con ironía.

El exregidor fue incluso incapaz de controlar ya la carcajada cuando su antigua socia de gobierno dijo que ni siquiera recordaba el nombre del partido del exandalucista, a pesar de que fue quien le permitió mandar en la Alcaldía.

La sesión comenzaba con la declaración como testigo de Pilar Sánchez. Media hora de ‘no recuerdo’, ‘no me acuerdo’, ‘no me consta’ y poco más. Eso fue más o menos lo que pudo sacar en claro la Sala de la Sección Octava de la Audiencia Provincial tras la versión de la exalcaldesa. Sánchez respondía a las preguntas del Ministerio Fiscal y las defensas por videoconferencia desde la cárcel de Alcalá de Guadaíra donde desde el 1 de febrero cumple condena por el ‘caso PTA’. Sólo el tribunal y las partes personadas pudieron verla ya que el monitor estaba girado hacia ellos. Pero poco más aportó ya que se limitó en casi toda su intervención a dejar claro que el tema en cuestión no lo recordaba, a pesar de que fue ella misma cuando fue alcaldesa quien puso la denuncia después de que Intervención detectara unas facturas sospechosas.

Tal fue su parquedad a la hora de aportar datos o fechas que pongan luz a la causa que juzga si se regaló a costa del erario público unas obras a la Hermandad del Rocío de Jerez, que, incluso, provocó las risas hasta en la bancada de los acusados.

Por el interventor

En primer lugar, a preguntas del fiscal, la exalcaldesa afirmó que no recordaba «exactamente» el proceso que siguió para presentar la denuncia. Si los hizo ante la Udyco, si lo puso en conocimiento del fiscal jefe de Jerez o cómo lo tramitó. «Fue hace diez años», se justificó. Sí aclaró que fue a través del interventor cómo le llegó un informe sobre unas facturas «que no se podían pagar», aunque, no entró en mucho más detalles sobre dicho escrito ya que, aunque sí lo recordaba, lo hacía solo «vagamente».

A preguntas del fiscal sobre los técnicos responsables de Urbanismo en aquellos tiempos, Sánchez tampoco arrojó nombres ya que, declaró: no recordaba «ni siquiera el nombre del partido que entonces tenía Pedro Pacheco». Su respuesta provocaba las risas evidentes del exalcalde jerezano quien mantuvo la sorna sobre la memoria de su antigua socia de Gobierno con gestos y sonrisas toda su declaración.

«No recuerdo ningún convenio de subvención ni firmé ninguno», contestó Sánchez, que añadió que «se hacían por convocatorias públicas» para asociaciones, hermandades y colectivos.

Sobre las obras en la Casa de la Hermandad del Rocío, insistía a preguntas de los abogados que «no sabía nada de eso» y que ni siquiera se le invitó a la inauguración «si la hubo». La exalcaldesa mantuvo también que se enteró que se estaban haciendo dichos trabajos cuando le llegó el informe del interventor sobre las presuntas irregularidades. Sánchez contó que no fue especialmente al Rocío de 2007, año de las obras, a la Casa de Hermandad de la localidad, sino que iba «todos los años desde 2000». Y que cuando fue aquella romería «no se percató de nada», a pesar de que ya se habían realizado los trabajos.

En cuanto a su relación con Pedro Pacheco admitía que los desencuentros con él se originaron «desde el principio», y que era él quien gobernaba «con poder absoluto» en la Gerencia de Urbanismo hasta que fue cesado. A este respecto, Sánchez afirmó no recordar si designó a alguien para que entonces ocupara dicha gerencia y si investigaron alguna actuación en particular de su exsocio. La exregidora matizó que le llegó el informe sobre las irregularidades una vez que el socialista Juan Pedro Crisol ocupaba ya el cargo de delegado de Urbanismo. «Así fue como me enteré».

Miembros de la hermandad admiten que la obra se iba a pagar con "obras menores"

Además de la exalcaldesa de Jerez, Pilar Sánchez, el Ministerio Fiscal había citado a otras personas relacionadas con el caso para que dieran su versión sobre cómo se gestionaron las obras que se hicieron en la Casa del Rocío de Almonte.Entre ellos, varios miembros de la junta de gobierno de la Hermandad de Jerez que estaban en dicho órgano en el año 2007, cuando se desarrollaron los cuestionados trabajos y que estuvieron presentes en las reuniones que se celebraron en la extinta Gerencia Municipal de Urbanismo. Así el mayordomo admitió que había tenido dichos encuentros. Según expuso a preguntas del Fiscal, el hermano mayor le comunicó que las obras se pagarían con obras menores. Por su parte, el segundo secretario también se pronunciaba a este respecto.

Pero, durante la declaración, se producía un momento algo tenso cuando los testigos ante las incisivas cuestiones del Ministerio Público intentaban matizar la versión que dieron en el juzgado de instrucción y aludían a unos documentos a los que habían tenido acceso para recordarlo. El fiscal entonces les preguntaba si se trataba de sus propias declaraciones y de quién se las había facilitado. Entonces, los testigos se referían a la defensa del hermano mayor y de Pacheco. El abogado aludido aseguraba al tribunal que no había influido en ningún momento en sus declaraciones.

El juicio, que se está celebrando en la Audiencia Provincial en su sede de Jerez contra el exalcalde andalucista Pedro Pacheco y otras nueve personas más, continuará esta semana con las declaraciones de más testigos. Entre ellos, está citado el interventor que, supuestamente, fue el que alertó de las supuestas irregularidades en las facturas.

La Fiscalía pide para Pacheco seis años de prisión por presuntos delitos de prevaricación, falsedad en documento oficial y mercantil y fraude a la administración, en concurso medial con el de malversación en grado de tentativa.