TRANSPORTE

El Ayuntamiento rebajará las tarifas de los autobuses hasta en un 25%

El gobierno cree que abaratando el precio del bonobús de 8 a 6 euros fomentará el uso del transporte público. Hoy también podría convocarse una nueva huelga del servicio si la asamblea de trabajadores ratifica esta medida en protesta por los impagos

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Los ciudadanos podrán beneficiarse de unas rebajadas tarifas del transporte público a partir del próximo año. Así lo ha anunciado hoy la alcaldesa, María José García-Pelayo, que ha adelantado que el ejecutivo ha decidido aplicar entre los meses de enero y febrero una reducción en los precios del abono de viajes de 8 a 6 euros (un 25%), así como rebajas especiales para colectivos como las familias numerosas o los discapacitados.

Según la regidora, lo que trata de fomentar el gobierno local es el uso del autobús, sobre todo con la intención de abaratar la aportación municipal en concepto de subvención a Urbanos Amarillos, la empresa concesionaria. «El pliego de condiciones recoge que cuantos más usuarios más se reducirá la aportación del Ayuntamiento», ha expuesto hoy la alcaldesa, que ha insistido en que con las actuales circunstancias económicas de la ciudad «había que hacer un esfuerzo para rebajar el precio del billete».

Mientras la primera edil realizaba esta mañana este anuncio los trabajadores de la concesionaria se han reunido en asamblea para decidir nuevas movilizaciones en protesta por los reiterados impagos que siguen padeciendo. Así, aunque tendrá que ser el segundo turno de trabajadores que se reúne esta tarde el que ratifique si se convocará un nueva huelga del servicio, el turno de la mañana ya ha votado a favor de los paros. «Estamos a día 12 y no hemos cobrado el mes de noviembre, tampoco sabemos si en tres días se abonará la paga extra, y lo peor es que ni siquiera hay una información por parte de la empresa de cuándo llegarán los ingresos», han apuntado desde el comité de empresa. La incertidumbre y la repetición de una situación que llevan soportando desde hace meses ha colmado de nuevo la paciencia de los trabajadores, que además valoran que la bajada de las tarifas anunciada «sería una buena noticia si realmente el servicio funcionaria bien y sin retrasos ni averías». «Dudamos de que los jerezanos vayan a subir más al autobús en las actuales circunstancias, cuando saben que en cualquier momento se quedarán tirados en la parada», han recalcado.