La agenda de reuniones con Defensa cae en saco roto

Aunque en un principio todo parecía que iba a cambiar, al final sigue de la misma manera. Y es que no hay ni reuniones, ni agenda, ni calendarios ni comisión técnica para tratar los asuntos relacionados con los suelos ociosos que Defensa tiene en la ciudad.

Ni un solo encuentro se ha producido desde que el Ministerio ofreciera públicamente su intención de retirarse del conflicto legal por los polvorines de Fadricas y negociar con el Consistorio la puesta en valor de las parcelas. Todo se ha quedado de nuevo en un compromiso vacío que parece que se va a alargar en el tiempo, puesto que el próximos día 20 se celebrarán elecciones generales y por tanto hasta que no se asiente el nuevo Gobierno que salga de las urnas, no se podrá retomar el tema.

Mientras tanto la situación continúa igual, pues este suelo sigue sin dar rentabilidad a la ciudad, que precisamente carece de terrenos en los que poder desarrollarse. De ahí la importancia de negociar cuanto antes estos aspectos con Defensa, ya que se paraliza el futuro desarrollo del municipio en una época poco propicia en la que la crisis se ha convertido en la protagonista del día a día.

Pero no es Fadricas el único asunto que se tiene que tratar con el Ministerio, ya que existen otros suelos que depende de esta Administración nacional y que también se encuentras totalmente paralizados. Es el caso de la Fábrica de San Carlos que a pesar de tener un plan especial para la zona sigue pendiente de acuerdos con Defensa para que se pueda construir en la zona.

Algo similar ocurre con Janer, aunque en este caso el problema radica en la necesidad de que se apruebe el Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) para que se certifique la venta de este suelo a Zona Franca una vez pase a ser industrial.

Por último los suelos de Camposoto, un tema interesante tras el anuncio del presidente de la Junta, José Antonio Griñán, en plena campaña de las municipales, de una posible desafectación de parte de su suelo por su falta de uso.