España debe recortar los salarios, aconseja el FMI

Después de las pensiones, los salarios. Recuperar la competitividad es un objetivo muy difícil para las economías de España, Grecia y Portugal, países que habrán de realizar «grandes sacrificios», que incluso pueden incluir una rebaja salarial. El economista jefe del Fondo Monetario Internacional (FMI), Olivier Blanchard, realiza este duro diagnóstico y sugiere tal medida en una entrevista que publica el diario francés 'Les Echos'.

Blanchard recuerda que estos tres países forman parte de la Unión Monetaria y ya no pueden recurrir a la devaluación de sus monedas, como hicieron en crisis precedentes. Por eso, y porque en el caso de España la recesión ya ha pasado una durísima factura en forma de desempleo masivo, uno de los pocos recursos que permitirá producir bienes y servicios a precios más bajos consiste en la reducción de las retribuciones.

Evoca el economista jefe que los socios del euro conocían desde el principio las ventajas e inconvenientes de la moneda única, que elimina los problemas asociados al tipo de cambio y aporta disciplina y estabilidad. Pero admitió también que la unión monetaria tiene un coste de «choques asimétricos», porque la política monetaria común no siempre favorece los intereses de países cuyas economías evolucionan a diferentes ritmos.

Considera «indispensable» que, no obstante la incipiente recuperación que se percibe en algunos estados, los bancos centrales, y entre ellos el BCE, mantengan los tipos de interés en los niveles actuales de mínimos históricos, durante largo tiempo, e incluso más allá de 2010, en tanto no se produzca una recuperación de la demanda privada. Perseverar en el precio del dinero barato no impedirá, a su juicio, la retirada de otros estímulos, de manera que los bancos centrales puedan endurecer su política monetaria en diferentes aspectos, sobre todo en los relacionados con la liquidez.

La iniciativa del Gobierno español de prolongar la vida laboral para financiar las futuras pensiones ha recibido, por otra parte, el beneplácito de la OCDE. Este organismo internacional sugiere elevar las exigencias para obtener una pensión completa y aplicar medidas para estimular el ahorro en planes privados de previsión.