El isleño Antonio Franzón, que en mayo cumplirá los 100 años, coloca una cinta en la bandera creada para la efeméride. :: C. C.
SAN FERNANDO

El hombre Bicentenario

Este vecino de El Parque ha sido el encargado de presentar la bandera que se ha recuperado como símbolo de la celebración Antonio Franzón nació en 1910 y, aunque sólo tenía cuatro meses, ya presenció entonces el primer centenario de Las Cortes

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Apenas tenía cuatro meses cuando los isleños salieron por primera vez a celebrar la promulgación de Las Cortes con una serie de actos cívicos enmarcados en el primer centenario de la efeméride. Ahora, su edad está a punto de escribirse con tres cifras en el mismo año que la resistencia a los franceses cumple dos siglos. Antonio Franzón nació el 21 de mayo de 1910 lo que le convierte en uno de los pocos isleños que puede presumir de estar a punto de vivir una nueva conmemoración del 24 de septiembre vinculada a un centenario.

Por esa razón, el Ayuntamiento decidió que fuera él quien descubriera la bandera que se ha recuperado para el Bicentenario, la misma que según los registros se elaboró hace 100 años. La misma edad que va a cumplir Antonio. «La bandera la siento como si fuera mía. Es mía porque es la misma que hicieron cuando nací para celebrar por primera vez Las Cortes y ahora la tengo entre mis manos. Estoy encantado de que cuenten conmigo porque siento todo lo de esta tierra pues como mi Isla no hay otra en España», afirmaba emocionado.

En forma

El estado de forma de este vecino de la barriada de El Parque es envidiable ya que vive en un segundo sin ascensor y no duda ni un instante en salir a la calle todas las mañanas para comprar el pan y darse su acostumbrada vuelta por la ciudad. Muchos son los cambios que guarda en su retina, pero lo que lamenta especialmente, es la pérdida de las antiguas huertas de la zona del Cerro de los Mártires, lugar en el que nació, así como de sus salinas. Pasó por Capitanía, fue a la guerra y trabajó en La Carraca para pasar a Bazán. No dudó en hacer lo que fuera para sacar adelante a sus siete hijos. Ahora también disfruta de 13 nietos y dos biznietos. Un Antonio que conoce el día a día de la ciudad pero que también fue testigo del duende de las noches de La Isla, aquel que se escondía en la Venta de Vargas. «He conocido a Camarón que fue de lo más grande que pasó por esta tierra, pero también he cantado con Lola Flores, Chato de La Isla y Alvarito de La Isla». Ha vivido la evolución de la feria, el esplendor militar e incluso el antiguo tranvía.

«En aquella época no se vivía la fiesta con tal intensidad y mi familia nunca me habló de grandes festejos por el Centenario», afirmaba Antonio. Eso es lo que quiere cambiar el Consistorio, que la celebración no caiga en el olvido. Por ello, ha recuperado una bandera que guarda en dos óvalos los escudos de la Nación y el de la ciudad entrelazados por una banda. La historia de España unida a la de San Fernando y un isleño testigo de los dos centenarios.