La sangría de los taxistas continúa

Si el pasado año fue nefasto para los taxistas jerezanos en lo que a pérdidas económicas se refiere, éste tampoco se presenta muy halagüeño para un sector que no puede más que mirar con desconfianza el futuro. El 2009 lo cerraron con un descenso importante de ingresos y a estas alturas el presidente de Teletaxi, Sebastián Blanco, ha confirmado ya que los profesionales están facturando un 40% menos de beneficios que en años anteriores.

Una situación difícil que hace que los afectados busquen vías que puedan abrirles nuevos horizontes, como su adhesión a la Asociación Nacional de Trabajadores Autónomos (ATA). Ayer se produjo la firma del convenio entre los representantes de ambos colectivos, lo que los taxistas confían en que les pueda favorecer en la lucha por salir de la debacle económica.

«La situación del taxi está por los suelos -reconoció Blanco-, por lo que será beneficioso que nos unamos. Tenemos una recaudación tan baja que no cubrimos ni gastos, y además no contamos con ayuda de ningún tipo». El presidente de ATA, Lorenzo Amor, apoyó su discurso haciendo hincapié en la importancia de que su asociación cuente desde este momento con 176 autónomos más, al tiempo que se mostró solidario con la coyuntura del taxi.

«Ellos sufren una de las principales características del autónomo, como es la soledad, porque sólo tienes a tu vehículo. El taxista depende de él mismo y es un termómetro de la economía de la ciudad». Como dato revelador, Amor adelantó que este año los profesionales jerezanos mantendrán las tarifas a pesar de que sí subirá el IVA, con lo que «todo caerá en las espaldas de ellos, lo que significará una pérdida de ingresos».

La puntilla, la Ley Ómnibus

La llamada Ley Ómnibus ha supuesto otro varapalo para el sector, ya que como se quejan los perjudicados supondrá la creación de un servicio paralelo a través de los vehículos de alquiler con chófer, gracias a la liberalización de esta actividad. Algo de lo que, como advirtió el presidente de los autónomos, se beneficiarán empresas que acudirán a los lugares más concurridos como hoteles o eventos diversos para ofertar viajes con precios mucho más reducidos.

«El intrusismo ha existido siempre -apuntó Blanco-, lo que pasa es que con esta medida ya será imposible de controlar». Frente a esto y al problema económico generalizado, desde Teletaxi se han planteado distintas opciones como los bonos descuento o las recogidas gratuitas, para contrarrestar la pérdida de clientela.

Sin embargo, su presidente se mostró ayer pesimista y confesó la dificultad para poner en marcha estas iniciativas. «En caso necesario lo haremos, pero lo veo complicado. En situaciones de necesidad de lo primero que se prescinde es del taxi, y hay muchos que se muestran reacios a utilizar el servicio».