La Fiscalía Antidroga de Jerez priorizará la lucha contra el crimen organizado

María Ángeles González Roldán es el nombre de la flamante fiscal antidroga de Jerez, que aunque comenzó su andadura el pasado lunes ayer fue presentada de forma oficial. Un cargo de una enorme responsabilidad, como ella misma reconoció, que nace de la necesidad de contar con una figura específica que luche contra uno de los tipos de delincuencia que más ha crecido en los últimos tiempos.

El número de asuntos tramitados en el Partido Judicial jerezano, de hecho, ha llegado al nivel de las poblaciones costeras que sirven de entrada para los alijos que llegan a la provincia, en la que esta localidad está considerada como el punto de distribución más importante. La fiscal jefe provincial, Ángeles Ayuso, aplaudió ayer durante el acto de presentación el hecho de que con esta dotación se haya dado respuesta a una demanda de hace al menos seis años, cuando Cádiz comenzó a despuntar en la cantidad de droga incautada, hasta situarse en el 25% de lo registrado en todo el país.

Los últimos datos que maneja la Fiscalía en este sentido se remontan a 2008, cuando las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado intervinieron un total de 250.790 kilos de sustancias estupefacientes, frente a los 134.031 kilos del año anterior. Un espectacular incremento que viene de la mano de una mayor presencia de organizaciones criminales, que están asentándose cada vez con mayor fuerza en la zona.

Sofisticación y violencia

Ésta es en la actualidad la mayor preocupación del Ministerio, ya que la investigación se vuelve cada vez más complicada debido a lo sofisticado de las bandas que operan en la demarcación judicial, que también comprende parte de la sierra y municipios como Sanlúcar y Chipiona, otros de los puntos calientes donde se mueve más droga.

«El problema fundamental es el tipo de organización -puntualizó Ayuso-, porque utilizan métodos cada vez más violentos, tienden a llevar armas y no dudan en utilizarlas. Se instalan aquí procedentes de otros países específicamente para esto; no es una cuestión de xenofobia, pero muchos vienen de Colombia a cometer delitos».

De ahí la urgencia de que haya que establecer un sistema de trabajo sólido y siempre en consonancia con la Policía Judicial, para que se coordinen adecuadamente actividades como escuchas telefónicas, el uso de agentes encubiertos o el bloqueo de capitales, todo ello técnicas específicas de los procedimientos relacionados con el narcotráfico. Unos casos cuyo número en tramitación ahora mismo asciende a la quincena, lo que también equipara al Partido Judicial jerezano con el de Cádiz.

Apoyo a la rehabilitación

«Es importante dirigir directamente a la Policía Judicial y el fiscal jefe tiene muchas ocupaciones, por ello es tan importante la labor del antidroga. No obstante, también prestamos mucha atención a actividades de rehabilitación y reinserción, estableciendo vínculos con colectivos que luchan por la erradicación del consumo. Hay que tener en cuenta que muchas de ellas son pobres personas explotadas por los traficantes».

González Roldán, por su parte, cuenta con una amplia experiencia en el terreno de la siniestralidad laboral y relaciones institucionales, lo que a juicio de la fiscal jefe será muy útil a la hora de desempeñar su nueva tarea. «Lo más complicado son estos grupos organizados -reconoció González-, porque hay que estudiar mucho para controlarlos. De todas formas, me gusta el trato con la Policía y creo que le podremos sacar mucho partido».