Los pescadores portaron una gran pancarta y recorrieron las calles de Barbate acompañados por ciudadanos y responsables políticos y sindicales. :: EFE / ROMÁN RÍOS
Janda

Más de 3.000 pescadores se manifiestan en Barbate y Tarifa ante la «agonía» del sector

A la marcha se sumaron sindicatos, políticos y vecinos para exigir, todos juntos, «medidas urgentes» que salven la economía local

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Los pescadores de las localidades de Barbate y Tarifa, junto a representantes del Ayuntamiento de ambos municipios, sindicatos y vecinos, se manifestaron ayer para pedir medidas urgentes que salven de la crisis a la pesca , un sector que está «al borde del abismo»-según han venido declarando desde hace meses- y del que depende buena parte de la economía local.

En Barbate, unas 3.000 personas, según los cálculos de la Policía Local y de la Guardia Civil y 3.500 según la Cofradía de Pescadores partieron a las diez y media de la mañana desde la lonja del puerto tras una pancarta en la que se leía: «Zapatero, Barbate se muere siendo europeo» y marcharon en silencio y pacíficamente hasta el Consistorio de la localidad.

Allí, el jefe de estudios del Instituto Trafalgar, Gonzalo Pedrera, leyó un manifiesto en el que recordó que la pesca, el principal sector económico de esta localidad y que alcanza un índice de desempleo «de más del 55 por ciento de la población activa», está «al límite de la supervivencia».

Entre las reivindicaciones de los pescadores recogidas en dicho manifiesto se encuentra la adopción por parte de las administraciones de «medidas de urgencia» como el tratamiento especial a las almadrabas -práctica pesquera artesanal- como también una actividad «sostenible» y «con derechos históricos». También reclamaron que las paradas biológicas de pesca no se realicen «a costa de la supervivencia del sector pesquero y almadrabero» y una apuesta «firme» de la administración «por el mantenimiento del empleo» y en contra de «una reconversión encubierta».

Además, el presidente de la Cofradía de Pescadores, Pedro Manuel Martínez, exigió que los planes de captura se hagan «sobre estudios biológicos y no sobre cuestiones políticas», que se actualicen los precios del pescado -según precisó el precio del boquerón es de hace quince años-, así como un mayor control de los productos pesqueros de otros países que «vienen semicongelados» y compiten con los locales.

Apoyo de todos

Para Martínez, que encabezó la marcha en Barbate, la manifestación ha sido «un exitazo del pueblo», que ahora espera «algunas respuestas» de las administraciones. «Si no nos va a quedar más que ir a Europa», aseguró, y recordó que la pesca da trabajo en Barbate a 500 marineros, cada uno de los cuales genera a su vez tres puestos indirectos, además de a 150 trabajadores de la almadraba. A la manifestación de los pescadores se sumó el alcalde de Barbate, Rafael Quirós (PSOE), para defender un sector «que está al borde del abismo» y en el que se basa la economía local.

Al término de la manifestación en esta localidad, en torno a las 12.00 horas, comenzó la celebrada en Tarifa, a la que asistieron más de doscientas personas que marcharon desde la lonja de pescado hasta el Ayuntamiento, donde se reunieron con el alcalde, Miguel Manella (PSOE), para solicitarle su mediación ante la Junta con el fin de obtener ayudas para el sector. Los pescadores, que portaron pancartas con lemas como «El recurso es necesario, comer también» o «¿Dónde está la política social?», protestaron también por los paros biológicos del atún rojo y del voraz establecidos.