Más tensión entre Fomento y controladores aéreos

El enconado enfrentamiento que mantienen el Ministerio de Fomento y los controladores aéreos a cuenta de la renovación de su Convenio Colectivo elevó ayer su ya alta temperatura, después de que el propio José Blanco criticara una «huelga encubierta» por parte de los vigilantes del cielo. Éstos siguen negando la mayor y rechazan que el colectivo esté llevando a cabo ninguna medida de presión. El ministro tomó el relevo de las autoridades de Navegación Aérea y asumió él mismo la crítica a los controladores, al afirmar en una entrevista a la cadena Ser que el que menos cobra de entre esos profesionales gana 370.000 euros al año. Una cantidad que, dijo, dobla la media del negocio en toda Europa.

«Son un sector privilegiado, y quieren distorsionar el funcionamiento ordinario de nuestro sistema de control», afirmó Blanco, quien se mostró dispuesto a negociar para «buscar fórmulas que resulevan un problema que preocupa a todo un sector que pierde competitividad». Con el tráfico aéreo en caída libre, Aena está obligada a recortar gastos, y el salario de los controladores es la primera vía: la empresa quiere ahorrar en ese capítulo 500 millones de euros hasta 2013.