Federer y Williams reciben los trofeos de campeones mundiales

El suizo Roger Federer y la estadounidense Serena Williams, quienes finalizaron el año al frente de las clasificaciones ATP y WTA, respectivamente, fueron designados ayer los mejores tenistas del año 2009 por la Federación Internacional (ITF). Un galardón que viene a coronarles como campeones del mundo.

Federer, de 28 años y probablemente el mejor tenista de todos los tiempos, recibió esta distinción por quinta vez en su carrera, mientras que para Williams fue la segunda tras su éxito en 2002. La menor de las hermanas Williams, también de 28 años, fue calificada, además, como mejor jugadora de dobles de la temporada, junto a su hermana mayor Venus, de 29 años.

Se trata de la primera tenista después de la suiza Martina Hingis, diez años atrás, que logra el lauro en singles y dobles en un mismo año. Entre los hombres, los gemelos estadounidenses Bob y Mike Bryan, de 31 años, fueron consagrados por sexta vez en dobles.

Ganador de dos torneos del Grand Slam (Roland-Garros por primera vez y Wimbledon por sexta) y finalista en los otros dos (Abierto de Australia y US Open), Federer recuperó este curso el número uno mundial que le había birlado el español Rafael Nadal, que este año sólo ganó sólo en Australia uno de los grandes torneos.

Serena, por su parte, repitió el galardón obtenido en 2002 y también ganó dos títulos del Grand Slam en 2009: Australia y Wimbledon. En dobles femeninos, las hermanas Williams obtuvieron tres títulos de los grandes: Australia, Wimbledon y US Open.

Los gemelos Bryan sólo ganaron el Abierto de Australia, pero además fueron finalistas en Wimbledon y se impusieron en todos los partidos de dobles para Estados Unidos en la Copa Davis.

Daniel Berta, de 17 años, mejor juvenil del año, es el primer sueco que logra este éxito desde que la obtuviera Thomas Enqvist en 1991. En este 2009, el tenista adolescente ganó en su categoría en Roland-Garros, y fue el quinto jugador ante Israel en Copa Davis. Entre las chicas resultó premiada la francesa Kristina Mladenovic, de 16 años, ganadora de Roland-Garros y finalista en Wimbledon. La mejor júnior precedente gala fue Amélie Mauresmo en 1996. Y acaba de 'jubilarse' con 30 años.