Rajoy dice que Zapatero no tiene ideas «ni principios ni proyecto ni programa»

Mariano Rajoy cree que José Luis Rodríguez Zapatero es el peor presidente del Gobierno desde la transición. Ayer dio en Málaga buena prueba de su desfavorable opinión, pues el líder socialista «no tiene ideas ni principios ni proyecto ni programa». El jefe del Ejecutivo, dijo, tiene todas estas carencias y, por tanto, gobierna a salto de mata, «según se producen los acontecimientos».

El líder de la oposición mostró una especial beligerancia con la política económica de Zapatero porque es «disparatada, ridícula y absurda» y demuestra que «no ha entendido» nada de «lo que hay que hacer» para superar la desfavorable situación económica. «Un día -prosiguió- dice una cosa y al día siguiente, la contraria». Rajoy, no obstante, se mostró convencido de que la crisis se superará, pero «tardará» por culpa de la política económica del Ejecutivo.

En su intervención en la comida de Navidad del PP de Málaga, señaló que el presidente del Gobierno tiene la habilidad de crear «problemas donde no los hay», pero cuando se enfrenta a uno «de verdad» su respuesta tiene «consecuencias imprevisibles». No se atrevió a decir que si él estuviera al frente del Ejecutivo todo sería de otra forma, pero lo dejó entrever. España, apuntó, sólo saldrá de la crisis cuando tenga un Gobierno que actúe «con sentido común y racionalidad», dos cualidades que Rajoy se suele atribuir.

También considero imprescindible para la superación de la crisis «el esfuerzo conjunto de empresarios y trabajadores», algo que ahora es imposible porque las centrales sindicales achacan la mala situación económica al comportamiento de la patronal. Un enfoque, dijo, «disparatado». Rajoy se refería a la manifestación del pasado sábado en Madrid, en la que los responsables gremiales culparon a los empresarios de la precarización del empleo y del deterioro de la economía.

El líder de la oposición indicó que Zapatero, en lugar de apostar por la austeridad en el gasto público, bajar los impuestos y hacer reformas estructurales en la economía, ha preferido subir la presión fiscal y «dilapidar el dinero de todos». No se olvidó que estaba en una ciudad turística como Málaga y puso el ejemplo de Francia, Grecia o Alemania, países que han rebajado los impuestos para la actividad hostelera, a diferencia de España, donde este sector aporta el 10% del PIB, y que soporta una subida el IVA.

El presidente de los populares remató su intervención con una felicitación de las fiestas navideñas a los asistentes, a los que aconsejó que para ser felices en estas fechas lo mejor que pueden hacer es «olvidarse de que existe Zapatero».

El líder del PP de Andalucía, Javier Arenas, actuó como telonero y no se quedó atrás en las críticas a Zapatero, al que acusó de gobernar «guiado por una minoríaintransigente» que pretende imponer una nueva ley del aborto que rechaza la mayoría, la memoria histórica, reitrar los crucifijos de las aulas e impartir educación ideológica en los colegios.