Sigue ingresado el policía herido en el tiroteo de Málaga en el que resultó muerto un hombre de 54 años

Uno de los policías nacionales que resultó herido el miércoles en el tiroteo en el que falleció un hombre en la barriada malagueña de Santa Rosalía-Maqueda, se encuentra estable en el servicio de Urgencias del Hospital Clínico Universitario de Málaga , con varios impactos de escopeta.

El otro agente recibió el miércoles mismo el alta médica después de que le curaran las heridas que presentaba.

El agente ingresado, J.D.G., de 34 años, está a la espera de ser sometido a las últimas pruebas diagnósticas, según indicaron fuentes del Hospital Clínico, que apuntaron que algunos de los impactos que presenta se encuentran cerca del hígado.

El suceso se produjo en la tarde del miércoles cuando, presuntamente, el fallecido, A.S.F., de 54 años, agredió con arma blanca a su hija, R.S.S.G., de 31 años, y la pareja de ésta, E.R. Tras estos hechos, agentes del Cuerpo Nacional de Policía iniciaron la búsqueda del supuesto agresor.

Finalmente, el vehículo en el que viajaba fue localizado en la salida de la barriada de Maqueda. Al parecer, el hombre, en lugar de entregarse a la Policía, salió de la furgoneta y esgrimió su escopeta de caza contra los policías, iniciándose un tiroteo, que se saldó con A. S. F. fallecido y dos agentes heridos.

Legítima defensa

El subdelegado del Gobierno en Málaga , Hilario López Luna, aseguró ayer que los policías que repelieron el miércoles a tiros los disparos de A. S. F., actuaron en legítima defensa.

López Luna ha lamentado el suceso y ha informado de que la hija del fallecido y el novio de ésta, no presentan heridas de gravedad. Un posible episodio de violencia familiar en la barriada Santa Rosalía-Maqueda, motivó la intervención de los agentes.

A la salida de la barriada, los policías encontraron el vehículo en el que viajaba el presunto agresor. Los agentes se vieron obligados a repeler la agresión, tras lo que se produjo la muerte de A.S.F.

Los hechos se han puesto a disposición del juzgado número 11 de Málaga y, según el subdelegado, hay un testigo, aunque habrá que esperar a los resultados de la investigación.

Los vecinos apuntan que el fallecido nunca encajó la separación de su hija y que desde el primer momento se negó a aceptar a la nueva pareja de esta. Dicen que esto motivó el ataque del miércoles.