El Unics Kazan aplica al DKV Joventut su misma medicina

El DKV Joventut sumó ante un Unics Kazan superior la primera derrota (71-82) en la Eurocup y se complica la primera posición del grupo C y el poco público que acudió al campo despidió a sus jugadores con una sonora pitada después de un juego decepcionante.

Los rusos aplicaron a los verdinegros su misma medicina: un enorme acierto desde la línea de 6,25: 11 canastas sobre 18 intentos pero a diferencia de los catalanes, que anotaron 10, tuvieron en un pivot, Kresimir Loncar, a su jugador más desequilibrante: 24 puntos.

El equipo verdinegro salió, como ya viene siendo habitual, con poca concentración y el Unics Kazan lo aprovechó para ponerse 2-11 en apenas tres minutos. Veremeenko anotó con demasiada facilidad y Loncar no tenía rival en la pintura. El tiempo muerto solicitado por Sito Alonso ante los silbidos de los aficionados no dio efecto (6-18, min. 5).

El Unics Kazan aprovechó la floja defensa local para acabar el primer cuarto con 29 puntos. El triple con el que Valters inauguró el marcador del segundo cuarto (21-29, min. 11) no significó la reacción de los verdinegros. Los rusos, con Zvarykin anotando con mucha facilidad en las penetraciones y Popovic y Samoylenko desde la línea de 6,25, llegaron a disponer de una máxima diferencia de 13 puntos (28-41, min. 18).

Tres triples que igualan el encuentro

El DKV Joventut reaccionó de la mano de Clay Tucker cuando dos triples de Veremeenko y Popovic pusieron a los rusos en su máxima diferencia (34-51, min. 24). El norteamericano de la Penya anotó 11 puntos en tres minutos y junto a Christian Eyenga acercó a su equipo hasta los cinco puntos (49-54, min. 27). La reacción se acabó ahí ya que dos triples de Stombergas volvieron a poner al Unics en una cómoda renta (51-64, min. 29).

Parecía que el partido ya estaba decidido con el 56-71 que señalaba el marcador a siete minutos del final pero apareció Tripkovic y con tres triples puso el marcador en un puño (69-71, min. 38). Pero a los verdinegros les pudo la ansiedad y se precipitaron en los lanzamientos de larga distancia, además de fallar cuatro tiros libres en el tramo final del partido. Un triple de Popovic a 1'11" del final sentenció el partido (70-78).