Extranjeros, ricos y privilegiados

La crisis económica pellizca de nuevo al fútbol español. La reforma de la Ley Beckham ha destapado un dato desconocido por gran parte de la opinión pública, pues eran muchos los que no sabían que si Cristiano Ronaldo, Ibrahimovic o Benzema se decantaba por la Liga en lugar del Calcio o la Premier era, entre otras cosas, porque tendría que pagar menos impuesto. Esta circunstancia beneficiaba directamente a los equipos españoles, pues, al fin y al cabo, a las estrellas del balón lo único que les importa es su salario neto, pero el Real Madrid, el Barcelona o el Sevilla podían competir contra el Chelsea, el Bayer o el Inter jugando con este importante as en la manga. Ahora que el chollo se acaba y los crack que ganen más de 600.000 euros anuales tendrán que ceder un 43% (una cifra similar a la que dejan de ganar los jugadores extranjeros en Francia o en Inglaterra) para abonar impuestos, se presenta un nuevo escenario. ¿Cómo afectará a las grandes entidades? ¿Dejarán de llegar estrellas del fútbol mundial a la Liga? ¿Apostarán más por la cantera los equipos españoles? No sé que ocurrirá, pero realmente no creo que cambie demasiado la situación, ya que el Madrid, el Barça, el Sevilla o el Valencia buscarán otras fórmulas para financiar los fichajes de estas grandes estrellas. En el peor de los casos, parece que en la Primera División tendrá que mirar en su cantera y tirar del producto nacional, algo que obviamente, beneficiará a los españolitos. Y es que el presidente de la LFP (que ha amenazado con la huelga en caso de que la reforma de la Ley continúe) parece olvidarse que son muchos los futbolistas españoles que forman parte de las plantillas de los equipos de Primera y que ven con muy buenos ojos la reforma, ya que equiparará la situación del jugador nacional con la del extranjero. Por tanto, la huelga sólo será el mejor camino a seguir si lo que se pretende es que explote una guerra en el fútbol español.