Sociedad

Objetivo cumplido

La Fundación Caballero Bonald cerró una nueva cita anual con su congreso con un programa serio, riguroso y atractivo

JEREZ Actualizado: Guardar
Enviar noticia por correo electrónico

Un año más la Fundación Caballero Bonald ha cerrado un congreso literario que en cada edición se supera a sí mismo. Dedicado a la relación entre la literatura y la naturaleza, la apuesta de este 2009 se presentaba complicada dada la originalidad del tema pero las previsiones, de nuevo, se han vuelto a superar.

«Estoy muy contento por cómo se ha desarrollado este congreso. Era un tema sobre el que hemos tenido que trabajar mucho porque no teníamos muchas referencias para hacer un programa atractivo», aseguró el gerente de la fundación jerezana, Fernando Domínguez, minutos antes de dar por concluidas las sesiones en los Museos de La Atalaya. «No ha habido ninguna sorpresa. Son muchos invitados y siempre les puede surgir algún problema de última hora pero este año se ha cumplido toda la programación», confirmó.

Completo

Las aportaciones de ponentes como Fanny Rubio, Aurora Luque, Joaquín Araujo, Julio Llamazares o Ian Gibson (que ofreció la conferencia de clausura) «han respondido a lo que les habíamos pedido. Están encantados de estar aquí y, por fortuna, el tiempo nos ha acompañado», continuó Domínguez. Al margen de su valoración, el responsable aseguró que lo importante es lo que piensen los asistentes. «Por lo que sé, están todos muy satisfechos», dijo.

Además, esta edición del congreso ha tenido el aliciente extra de la presencia de Mario Vargas Llosa, que ha acudido a Jerez a recibir el Premio Internacional de Ensayo Caballero Bonald por su obra El viaje a la ficción: el mundo de Juan Carlos Onetti. «La presencia de Vargas Llosa ha sido un colofón estupendo, acompañada, además de la visita de Jorge Edwards, que no estaba prevista en un principio», aseguró Domínguez. En total, más de 230 inscritos han participado en los tres días de conferencias, mesas redondas y debates que han convertido a los Museos de La Atalaya, de nuevo, en «el principal foco de atracción cultural de España», como aseguró el propio Caballero Bonald al inicio del congreso.