Plan B al euro

Vaya revuelo que se ha montado con la oferta del grupo STX Global Services a Joaquín Morales. Como ya comentó mi amigo Salva Galván en este periódico, el montante económico por el que Fernando Rodríguez de Rivera quería hacerse con las acciones del Xerez era de un euro. Dicha moneda es una cuantía simbólica. Pero no nos quedemos en la anécdota. La oferta realizada por dicho grupo consistiría en asumir la totalidad de la deuda del club. ¿Pero cuál es la deuda del Xerez? ¿Veinte, veinticinco, treinta millones de euros? No lo se. Podemos especular con números pero el único que realmente sabe cuál es el boquete que tiene la entidad es el señor Morales. Si el consejero delegado hubiera realizado una auditoria que cuantificara las deudas del club, podríamos evaluar si la oferta es buena o mala. Quizás ha sido hasta exagerada, no lo se. Además, Luz Costa Inmuebles pasaría a ser un acreedor más y de entrar en la Ley Concursal, cobraría, como uno más, aquello que el Xerez le adeuda. A lo mejor no es tan mala oferta. Hay una gran diferencia entre comprar un club en Primera División y un club en ruina, descendido en todas las quinielas y sin ningún tipo de patrimonio. Si al menos tuviera un estadio propio en la Avenida Álvaro Domecq, como le ocurre al señor Lopera en Sevilla, lo entendería. El señor Morales está en todo su derecho de rechazar la oferta de STX pero los accionistas minoritarios, los socios y los aficionados queremos saber cuál es el plan B. Ningún miembro del consejo de administración del club ha dado la cara para explicar la negativa a la oferta; es más, no sabemos oficialmente si se ha denegado o no. Después del «aquí está el tío» ¿que es lo que nos espera? ¿Qué medidas va a adoptar el tío? Espero que nos lo expliquen, que no se de una callada por respuesta. Estoy deseando escucharles.