Economia

Telefónica lanza una OPA de 2.500 millones por el 100% de la operadora brasileña GVT

La multinacional española apuesta por seguir creciendo en el mercado suramericano al contraatacar una oferta previa y 'amistosa' de Vivendi

MADRID Actualizado: Guardar
Enviar noticia por correo electrónico

Telefónica impone su poderío. En un momento en el que el acceso al crédito y las operaciones corporativas escasean en todo el mundo, la multinacional española anunció ayer que su filial en Brasil (Telesp) ha lanzado una Oferta Pública de Adquisición de acciones (OPA) sobre el 100% de la compañía de telecomunicaciones del país carioca GVT Holding, una firma especializada en servicios de telefonía fija y banda ancha en las regiones Sur, Centro-Oeste, Sudeste y Nordeste del país.

La propuesta valora GVT en 6.500 millones de reales, unos 2.550 millones de euros, y llega poco después de que Vivendi presentara una oferta amistosa por 2.000 millones, tras obtener el consentimiento de dos grupos de accionistas que controlan el 20% del accionariado. Los analistas no descartan que se abra ahora una guerra de opas en la que algunos sitúan también a la mexicana Telmex.

La noticia salta cuando faltan 48 horas para que la firma presidida por César Alierta celebre su denominado Día del Inversor, una jornada en la que acostumbra a detallar sus planes en todos los ámbitos y sobre todo, pues es casi lo más esperado, su política de retribución al accionista.

Según una nota enviada por Telefónica a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), el consejo de administración de Telesp ha aprobado la presentación de la OPA a un precio de 48 reales brasileños por cada acción de GVT. Vivendi estaba dispuesta a dar 42 reales por título.

El 51%

Uno de los grandes atractivos de la oferta de Telefónica es que toda la operación será pagadera en metálico. Algo que últimamente se ha sustituido por papelitos de la compañía compradora.

La oferta, aclaró la filial de Telefónica, está sujeta, entre otras condiciones, a la aceptación de la misma por parte de al menos el 51% del capital social de GVT. También exige la española la adopción de un acuerdo por parte de la junta general de accionistas de GVT para la no aplicación de los mecanismos de protección previstos en los estatutos sociales de la empresa.

Del mismo modo, y como es habitual, se requiere la aprobación por parte de la autoridad regulatoria brasileña (Anatel) sin la imposición de restricciones o condiciones diferentes de las que, normalmente, ha venido exigiendo en casos precedentes.

Telefónica explicó al mercado que el éxito de la operación permitirá a la compañía «alcanzar una mayor presencia fuera del Estado de Sao Paulo, «lo que contribuirá a ampliar el número de accesos, además de fortalecer la competencia en el mercado brasileño de las telecomunicaciones». El resultado de la combinación de la solidez financiera de Telefónica con el potencial crecimiento de GVT «representa una oportunidad para proveer excelencia tanto en tecnología como en atención para la prestación de servicios», recalcaron fuentes de la firma presidida por César Alierta.

La radiografía de GVT Holding desvela una compañía que opera bajo las marcas GVT, POP y VONO y que los expertos definen como el operador alternativo más importante. Nacida en 1999 como alternativa a Brasil Telecom, desde entonces ha realizado inversiones por valor de 3.000 millones de reales. GVT está presente en 82 ciudades, sobre todo en la denominada Región II, con más de 27.000 kilómetros de red local (de los 5.000 kilómetros son de fibra de vidrio) y 15.000 kilómetros de redes de larga distancia.

La empresa comenzó a cotizar en el Novo Mercado en 2007 y en la actualidad cuenta con una capitalización bursátil de 5.400 millones de reales. Los fundadores del grupo controlan la compañía con un 311% del capital social. El 68,9% restante es free float; esto es, cotiza libremente en Bolsa.

El foco de la estrategia actual de GVT está dirigido a clientes de elevado consumo procedentes del mercado residencial, así como a las pequeñas y medianas empresas y las corporaciones.

Actualmente centrada en el crecimiento de las ciudades del norte (Región I), GVT se presenta como una buena oportunidad para Telefónica, puesto que es la única compañía entrante que ha tenido éxito en la telefónica fija de Brasil.

Su presencia geográfica es compatible con la de Telesp y cuenta con unas sólidas tasas de crecimiento. Las acciones de Telefónica cayeron un 1,6% en un día de recogida de beneficios hasta los 19,03 euros por título.