ESPAÑA

La trama intentó llegar hasta la Casa Blanca

MADRID Actualizado: Guardar
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La trama Gürtel intentó extender su influencia a la más poderosa institución del planeta, la Casa Blanca. Así lo revela un informe de la Unidad de Delincuencia Económica y Fiscal de la Policía Nacional, que apunta que el presidente de la Generalitat Valenciana, Francisco Camps, atosigó a llamadas al muñidor de la red en Valencia, Álvaro Pérez, El Bigotes, para que contactara con un asesor de Barack Obama a fin de influir para conseguir la organización de los premios de música Grammys Latinos.

El jefe de la trama, Francisco Correa, había propuesto a la Generalitat que este espectáculo se celebrara en 2009 en Valencia, obviamente gestionado por su gente, después de quedar impresionado por la gala musical que acaba de presenciar en la ciudad texana Houston. Ese informe, que incluye las «conversaciones relativas a personas públicas», se hace eco de una entrevista que mantuvieron el 17 de noviembre del año pasado El Bigotes y la mano derecha de Francisco Correa, Pablo Crespo. El primero informa al segundo que «el presi» le «ha llamado tres veces», pues Francisco Camps «quiere que le gestione una entrevista con Bill Richardson, gobernador de Nuevo México, y que suena como posible asesor presidencial del nuevo presidente de Estados Unidos».

La Policía Nacional señala que El Bigotes estaba dispuesto a llegar a la Casa Blanca a través de los contactos que tenía el abogado Manuel Delgado. El Bigotes y Pablo Crespo parecen en esa conversación muy bien informados de la política internacional. Ambos opinan sobre el futuro político de Bill Richardson, de si su puesto será el de secretario de Estado o el de asesor principal de Barack Obama.

Y, efectivamente, el 3 de diciembre de 2008, medio mes después de esa conversación, Bill Richardson fue nombrado secretario de Comercio por el presidente estadounidense. Sin embargo, poco después renunció al cargo por estar supuestamente implicado en una red de corrupción que favoreció a una empresa de su país. El mismo ilícito que El Bigotes pretendía solicitar en nombre del presidente de la Generalitat valenciana.