La empresa aún no ha contactado con sus pacientes. /CRISTÓBAL
Jerez

Los afectados por el inesperado cierre de la clínica Dental Line de Jerez superan ya el centenar

El colegio de dentistas de la provincia ha mostrado su apoyo a los pacientes El colectivo se reunirá con la Federación de Consumidores para recibir asesoramiento

JEREZ Actualizado: Guardar
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El número de afectados por el repentino cierre de la clínica Dental Line de Jerez supera ya el centenar. Al menos, ésa es la cantidad de personas que se ha interesado hasta el momento por interponer reclamaciones a la empresa, que cerró sus puertas entre el 22 y el 23 de septiembre sin comunicárselo a sus clientes e interrumpiendo así los tratamientos.

«La empresa no ha dicho nada ni se ha puesto en contacto con nosotros», aseguró ayer una de las afectadas, María del Rosario Jimena. Los que sí han mostrado su apoyo a los afectados son los responsables del Colegio de Dentistas de la provincia de Cádiz, así como la Federación de Consumidores en Acción, Facua, con quien mantendrán un encuentro esta misma semana. La experiencia y el asesoramiento de Facua en estos temas -ya llevaron otros asuntos similares como el cierre de las academias Opening o el caso del Fórum Filatélico- son muy importantes en este momento para los afectados ya que muchos de ellos han abonado unos costosos tratamientos que no han recibido aún o de los que se han quedado a medias. La intención de todos ellos es presentar una demanda conjunta y no denuncias individuales como habían hecho hasta ahora.

Por otra parte, uno de los ortodoncistas que trabajaba en Dental Line se ha ofrecido a continuar atendiendo a sus pacientes en su clínica particular a partir del 15 de octubre.

En la provincia

Además de los jerezanos, otros muchos de los afectados por el cierre de esta clínica dental de Madre de Dios son de la capital gaditana. La razón es que estos pacientes fueron derivados a las instalaciones jerezanas cuando la clínica de Cádiz cerró sus puertas hace algún tiempo. Algunos de ellos tuvieron tiempo para ser atendidos, al menos, una vez, en Jerez mientras que otros ni siquiera llegaron a tener una cita cuando conocieron la noticia del cierre.