El déficit del Estado se multiplica por cinco y se sitúa en el 4,6% del PIB

La crisis y la menor recaudación han hecho que el déficit del Estado entre enero y julio sea de 49.687 millones de euros, el 4,69% del Producto Interior Bruto, lo que supone cinco veces el saldo negativo registrado en el mismo periodo del año anterior. Según los datos del Ministerio de Economía y Hacienda, el Estado ha ingresado hasta julio 57.952 millones de euros, el 25,8% menos que en el mismo periodo de 2008, y gastó casi 107.639 millones de euros, el 22,3% más que entre enero y julio del año pasado.

En términos de caja -que computa los ingresos y pagos cuando se efectúan y no cuando se comprometen, como hace la contabilidad nacional- el Estado ha alcanzado un déficit de 50.946 millones de euros, también cinco veces superior al de los siete primeros meses de 2008, en que ha empleado 10.553 millones.

Según Economía, el déficit registrado se debe analizar como consecuencia de la coyuntura económica, pero también por el impacto de las medidas tomadas por el Gobierno para atajar la crisis, actuaciones que ascienden a más de 25.000 millones y que van desde reducciones de impuestos a medidas de fomento de empleo e inversión o aumento de las prestaciones por paro.

La recaudación neta ha ascendido a 94.378 millones de euros, un 16,9% menos que en 2008, y los ingresos por impuestos directos se elevaron a 49.264 millones, el 14% menos. Ha bajado de forma drástica la caída de la recaudación por el Impuesto de Sociedades, que fue del 25,2%, debido a los menores beneficios empresariales en tiempos de crisis y a la agilización de las devoluciones. En el caso del IRPF, la caída de la recaudación fue del 12,9%, debido a la agilización de las devoluciones, los mayores aplazamientos y a la deducción de 400 euros.

Caen los ingresos por impuestos

Los ingresos por impuestos indirectos alcanzaron los 34.861 millones de euros, un 27,5% menos que en 2008. En el caso del IVA -el impuesto que grava el consumo y denota por tanto su evolución-, la recaudación fue de 22.432 millones de euros, un 36,1% menos en comparación al ejercicio anterior. Este descenso se debe en parte, según Economía, al adelanto de devoluciones, así como a la ampliación del derecho de devolución mensual y a los mayores aplazamientos contabilizados. También bajaron, aunque en menor medida, los ingresos por impuestos especiales, que sumaron 10.851 millones de euros, un 3% menos. De este capítulo destaca la caída en la recaudación del Impuesto sobre el Alcohol y las bebidas derivadas, que fue del 13,3%, mientras que la recaudación del Impuesto sobre Hidrocarburos registró un descenso del 6,3%.

Frente a la caída generalizada de los ingresos, los gastos del Estado aumentaron el 24,5%, hasta los 108.703 millones de euros. Este aumento se debió sobre todo al de las transferencias corrientes, que crecieron el 24,5%, hasta los 60.064 millones de euros. Dentro de las transferencias corrientes se incluyen las realizadas al Servicio Público de Empleo Estatal por 9.058 millones de euros para hacer frente a las prestaciones por desempleo.

Más pronunciado fue el aumento de las transferencias de capital, de hasta un 188,7%, hasta los 10.917 millones de euros, de los que buena parte se han destinado a financiar el Fondo Estatal de Inversión Local. Todos estos datos han hecho que el Estado tuviese hasta junio una necesidad de endeudamiento de 61.529 millones de euros frente a los 6.837 millones de un año antes.