Alves apunta a la titularidad ante el Athletic. / EFE
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El Athletic confía en sorprender a un Barça con bajas

| COLPISA. MADRID Actualizado: Guardar
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Las pruebas, ensayos y experimentos se terminaron. Athletic y Barça disputan hoy en San Mamés la ida de la Supercopa de España, el torneo que da el pistoletazo de salida al inicio oficial de la temporada. Para los leones es una oportunidad histórica de sumar su segundo trofeo de esta índole. Para los culés supone la primera prueba seria del presente curso y la posibilidad de conquistar el primero de los seis títulos a los que optan este año. Además, supondría igualar al Real Madrid con ocho Supercopas.

Los azulgrana parten como favoritos pese a las numerosas bajas. Pep Guardiola no podrá contar con el sustituto de Eto'o, Zlatan Ibrahimovic. Habrá que ver si los catalanes notan la ausencia de la fiabilidad y eficacia que les aportaba el delantero camerunés. Tampoco estarán los lesionados Andrés Iniesta y Rafa Márquez. Incluso la presencia de Leo Messi es improbable. La estrella argentina sufre una contractura en el muslo de la pierna izquierda y es posible que el técnico de Santpedor le reserve hasta su total recuperación.

La ausencia de Íker Muniaín fue la gran sorpresa de Joaquín Caparrós. El técnico andaluz dejó fuera de la convocatoria al héroe de Suiza. El canterano de 16 años consiguió el gol que dio la clasificación a los vizcaínos para la Liga Europa -antigua UEFA- ante el Young Boys suizo.

Caparrós es consciente de que mantener la portería a cero es fundamental para llegar con vida al Camp Nou. «Tenemos que estar seguros atrás y ser eficaces porque vamos a tener nuestras opciones», aseguró el técnico sevillano.

Los leones basarán hoy su juego en una asfixiante presión que dificulte la circulación del balón al rival. El Athletic cuenta con la ventaja de jugar ante su público, lo que siempre es un aliciente en San Mamés. También llegan más rodados, ya que empezaron la pretemporada antes para preparar la eliminatoria ante el Young Boys suizo.