«La mayor ilusión que tengo es llegar a División de Honor»

-¿Desde cuándo lleva jugando al fútbol a nivel profesional?

-Profesionalmente, llevo jugando desde los diecinueve años, que empecé con el Autos Lobelle.

-A sus veintiún años goza de un currículo interesante.

-La verdad es que sí. Primero estuve en el Lobelle los cinco años que firmé y me quedé en el primer año con el filial y con el primer equipo. Fui convocado para la Súper Copa de España, la Recopa de Europa la ganamos y también jugué la Copa Xunta. El segundo año estuve cedido en Albacete y quedamos a cinco puntos de los Play Off. Metí 34 goles en Plata y jugué en la Selección sub'21 de España. Este año he jugado en el Clipeus Nazareno en Plata hasta que en el mercado de diciembre fiché por Melilla por unos problemas que hubo con el Nazareno allí en Sevilla y me tuve que ir.

-¿Por qué decidió jugar a fútbol sala?

-Yo juguaba también al fútbol, pero del fútbol sala me gustaba más los movimientos. Es verdad que es más duro que el fútbol, te mueves más y hay que correr mucho más y por eso me encanta.

-¿Qué le llega a aportar este deporte a nivel personal y profesional?

-Profesionalmente, al ser el campo más pequeño uno se mueve más y, para mí, es mejor que en fútbol porque ahí hay que esperar más tiempo a que te llegue el balón. En el fútbol sala se requiere más rapidez y, como me considero bastante rápido y ágil, personalmente es lo que más me gusta y lo que me llamó más la atención.

-¿Cuál ha sido el campeonato más duro al que ha tenido que enfrentarse?

-Campeonato duro duro fue el de España en el que perdimos en los penaltis contra El Pozo. Quedamos 0-0 y al final acabamos segundos. También hubo un partido que perdí en Cádiz contra el Interviú Boomerang. Este deporte es muy competitivo.

-¿Cuáles son sus aspiraciones deportivas para la próxima temporada?

-La mayor ilusión que tengo es llegar a la División de Honor y, como lo difícil no es llegar sino mantenerse, me encantaría llegar a esa categoría.