El presidente depuesto de Honduras, Manuel Zelaya, habla ante la prensa ./ Efe
golpe de estado

La CE confirma la congelación de 65,5 millones de ayuda a Honduras

Desde Bruselas aseguran que "si se permite la vuelta" del presidente depuesto "se reconsiderará" la actuación

BRUSELAS Actualizado: Guardar
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La Comisión Europea (CE) ha confirmado la congelación de 65,5 millones de euros de ayuda presupuestaria directa al Gobierno hondureño tras el fracaso de las gestiones del gobernante costarricense, Óscar Arias, para encontrar una solución a la crisis política de ese país. La comisaria europea de Relaciones Exteriores, Benita Ferrero-Waldner ha tomado una decisión que ya adelantó la pasada semana la responsable de Comercio Internacional, Catherine Ashton, en Estrasburgo.

"Lamento mucho que no haya sido posible hasta el momento llegar a una solución mutuamente aceptable a la crisis hondureña, en línea con las propuestas del presidente Arias", ha asegurado Ferrero-Waldner en nota de prensa. Según ha explicado el portavoz comunitario Amadeu Altafaj, "si la crisis se prolonga, esta congelación podría transformarse en una pérdida" de las ayudas.

Por el contrario "si se permite la vuelta" del presidente depuesto de Honduras, Manuel Zelaya, y se inicia "un proceso serio de diálogo nacional", la congelación "se reconsiderará", ha añadido. La Unión Europea tiene presupuestados para el periodo 2007-2013 223 millones de euros de ayuda a Honduras, de los que 127,5 corresponden a la partida 2007-2010.

Soluciones

Dentro de esta última, lo que se congela son los 65,5 millones de apoyo presupuestario, es decir, que pasarían directamente a ser controlados por el gobierno, mientras que el resto se distribuye por otras vías, como las organizaciones no gubernamentales. Ferrero-Waldner ha instado en su comunicado a las dos partes a "demostrar su buena voluntad para dar los pasos necesarios que permitan la solución de la crisis".

"Estoy animada por el hecho de que se haya previsto retomar las conversaciones pronto", ha afirmado. Ha añadido un "serio llamamiento" a las dos partes a evitar cualquier acción o declaración que pueda elevar la tensión, "complicando más la perspectiva de una solución". "Esta es una crisis que difícilmente puede afrontar Honduras", ha dicho.