Una gripe como 'souvenir'

«Han sido unas vacaciones para olvidar». Con esta frase termina el cocinero gaditano Juan Ramón Ortiz su relato a LA VOZ del crucero que junto a su pareja sentimental, Irene Rodríguez, realizó hace unos días.

Ambos formaban parte del pasaje del Ocean Dream, el barco vacacional de la compañía Pullmantur que en el transcurso de la travesía se vio afectado por un brote del virus H1-N1, conocido popularmente como gripe A.

«Enseguida nos dimos cuenta de que aquel viaje no iba a ser normal; a las pocas horas de zarpar desde la Isla de Aruba (en el Caribe) nos dijeron que había personas contagiadas por la gripe», explica Juan Ramón, que ayer pasaba la tarde de sábado en la playa de La Barrosa junto a su novia, a la espera de realizarse un reconocimiento médico el próximo lunes.

Y es que tanto Juan Ramón como Irene no tienen síntomas ni han dado positivo todavía por el virus, pero ambos han recibido ya la baja protocolaria en su empresa como medida de precaución.

«Cuando regresamos a España no fuimos al médico porque no hemos tenido apenas síntomas, pero aun así estamos preocupados porque nos han dicho que la gripe A suele tardar en incubarse unos 11 días y la fecha se cumple el miércoles», asegura la pareja.

De momento, sólo la chica se queja de un leve dolor de garganta, aunque las únicas recomendaciones que han seguido son «no estar en sitios cerrados y vigilar la fiebre o los dolores que tengamos».

En los días de «calvario y desinformación» que, -aseguran-, vivieron en el crucero hace dos semanas, visitaron al médico de a bordo varias veces. También critican que la tripulación del barco «apenas nos informaba de lo que pasaba; sabíamos que no nos dejaban atracar en puerto pero no mucho más», recuerdan. Juan Ramón e Irene lamentan además la «desesperación» que sintieron a los tres días de haber zarpado; «estábamos cerca de Barbados y por la megafonía del barco dijeron que había personas afectadas». Por aquel entonces, la noticia de que el crucero de ocho días fletado por Pullmantur para recorrer las islas más suntuosas del Caribe tenía un brote de nueva gripe había saltado a los medios de comunicación de medio mundo.

«Nosotros fuimos los últimos en enterarnos; sabíamos que había gente con síntomas, pero la única medida de precaución que tuvieron fue la de tomarnos la temperatura y juntar a quienes tenían dolores o vómitos en un cuarto».

El grupo de 200 españoles que formaban parte de los 789 pasajeros que transportaba el Ocean Dream, entre los que están ambos gaditanos afincados en San Fernando, ha decidido solicitar a la naviera «daños y perjuicios por arruinar nuestras vacaciones». Ellos consideran (incluso existe un vídeo que lo atestigua), que el crucero zarpó a sabiendas de que transportaba personas enfermas.

«La compañía nos dice que en todo momento han seguido el protocolo marítimo en estos casos», pero «nosotros pensamos que se cometió la negligencia y luego sólo se les ocurrió tenernos cinco días sin salir del barco», lamentan.