El PP califica de «nazi» la actitud del PSOE y éste pide «respeto» a toda la oposición

El equipo de Gobierno municipal y la oposición han vuelto a enfrascarse en un cruce de acusaciones mutuas. El PSOE y sus socios, PSA e IU, han criticado abiertamente al Partido Popular por su actitud en los plenos.

En un comunicado oficial emitido ayer, el Gobierno ruega al PP que «mantenga una actitud respetuosa y políticamente correcta», en lugar de «la actitud beligerante y conflictiva que adopta durante estas reuniones de la Corporación municipal, en la que desde los bancos del partido popular se oyen incluso insultos», aseguran.

El tira y afloja verbal no acaba ahí, y desde el equipo gestor se exige al PP que «arrimen el hombro, o que al menos respeten la institución en la que se encuentran y a todos los chiclaneros y chiclaneras que en ella se representan».

Por su parte, desde el PP se defienden atacando, y califican a la portavoz socialista, Manuela Moreno, de «insultadora profesional», así como de representar «lo más bajo que puede existir en política».

Más crispación

Los populares afirman que «no es posible que una señora que lleva en política más de 10 años lo único que sepa hacer es insultar y mentir sin ningún tipo de pudor».

Desde el partido mayoritario de la oposición local se considera que la portavoz «es una terrorista política», cuya actitud avala, según ellos, «la actitud nazi y genocida que tiene el PSOE con nosotros, ya que lo que busca es eliminarnos».

Este cruce de declaraciones se produjeron ayer tras la intensa sesión plenaria que tuvo lugar hasta pasada la medianoche del jueves. En ese debate plenario se volvieron a reproducir los insultos y las salidas de tono por parte de los distintos representantes de los partidos políticos.

Llamó la atención sobremanera el distanciamiento interno que existe entre los dos concejales del Partido Andalucista, Manuel Guerrero y Estefanía Benítez, que en un momento de la sesión plenaria se criticaron por la defensa de sus intereses.

Además, durante la sesión, los ediles no inscritos, José Pedro Butrón y José Antonio Blanco, que siguen enfrascados en una disputa interna con su partido, IU, volvieron a desacreditar a la figura de la representante de la Gestora de Izquierda Unida en el Ayuntamiento, Nadine Fernández.