Los comerciantes del centro se concentran y Lorenzo niega retrasos en la obra del tranvía

Los comerciantes afectados por las obras del tranvía en la calle Real se concentraron ayer en la Oficina del Tranvía. Esta protesta coincidía con una visita del delegado provincial de Obras Públicas, Pablo Lorenzo (PSOE), con el Consejo de Hermandades y Cofradías para abordar la organización de la Procesión Magna del año 2010. Mientras que este encuentro fue «satisfactorio», según aseguró el propio Lorenzo, el que tendrá la próxima semana con la Asociación de Comerciantes (Acosafe) se prevé más tenso. Así, fue esta asociación la que ayer dirigió la protesta del resto de empresarios (asociados y no asociados) que exigían una mejor organización de las obras del tranvía.

El retraso de los plazos previstos para cada tramo y las molestias ocasionadas por las obras son algunas de las quejas de los comerciantes que, aseguran, suceden por «falta de organización». También mostraron su preocupación sobre la reducción de turnos de las obra que habría pasado de tres (mañana, tarde y noche) a sólo dos. Además, también explicaron algunos comerciantes que la empresa encargada de los trabajos estaba reduciendo el número de empleados.

La presidente de Acosafe, y portavoz del medio centenar de empresarios que se concentraron ayer en la calle Real, explicó que «hoy estamos aquí de forma pacífica para demostrar que somos muchos y tenemos fuerza, pero esperaremos al encuentro de la semana que viene con el delegado de Obras Públicas para decidir si realizamos protestas más contundentes».

Por su parte, Pablo Lorenzo aseguró no tener conocimiento de que la empresa constructora estuviese reduciendo el nivel de trabajo, y explicó que los retrasos en los tramos en obra se deben «al mal estado de la red de saneamiento de la ciudad, que plantea inconvenientes que no estaban previstos». Lorenzo explicó además que los plazos generales se están cumpliendo y que el contrato refleja una penalización si no llegan a cumplirse.