Las obras del tranvía comprometen el futuro de los negocios de la calle Falla

Los comerciantes del tramo que va desde Manuel de Falla a la calle Lope de Vega afirman estar en una situación «crítica». A la manida crisis económica se ha sumado el ahogamiento por las pérdidas provenientes de soportar durante siete meses las obras del tranvía en la entrada de sus establecimientos. Según las planificaciones realizadas inicialmente, la duración de los trabajos en cada tramo de obra se situaría en torno al mes y mes y medio. Sin embargo, los afectados llevan desde octubre con la calle levantada y las vallas delante de sus escaparates.

La perspectiva de futuro de los negocios no es muy halagüeña para los 15 comercios que se encuentran en el lugar. Así, ya hay tres establecimientos que se han visto obligados a cerrar o que cerrarán próximamente, mientras que otros se ven «con la soga al cuello» e incluso hay quien ha tenido que prescindir de la mitad de su plantilla, como es el caso de Tejidos Aparicio. Los comerciantes aseguran «desconocer la fecha en que las máquinas se irán de la zona» y hasta cuándo tendrán que convivir con tales dificultades.

Ya son varios los plazos que les dieron para que el tramo estuviera terminado. Tanto en Navidad como en Semana Santa, las máquinas volvieron a instalarse tras las fiestas para levantar la calle. Los comerciantes fundamentan sus críticas con las ventas, ya que según las estimaciones que han realizado las pérdidas se sitúan en el 60%. Pero también han llegado a notar que los días que han estado sin vallas, como en el caso de la Semana Santa, han logrado las mismas cifras de ventas que en todo un mes con obras.

Preocupación

Las molestias que están causando los trabajos son evidentes. Tal y como expone María del Mar Velasco, propietaria de una tienda de calzado infantil, «he tenido incluso que hacer entrar a mis clientes por la trastienda porque era imposible por la entrada. Ya estoy reculando y según mis cuentas voy a ser la próxima en tener que irme».

Elizabeth Alias es dependienta del negocio de calzados Loremar y afirma que a pesar de que «la voluntad de los obreros es la de ayudar, ha habido muchas ocasiones en la que nos han complicado el trabajo. Han puesto pegas a la realización de la carga y descarga y no han dado alternativas a las personas para que entraran al comercio».

Antonio de la Peña tiene una tienda de moda infantil y asegura que «ahora estamos mejor porque hay una acera amplia para que pasen. Pero, los meses anteriores han sido asfixiantes. Mi tienda es para bebés y resultaba imposible que entraran clientas con carros».

Al cierre de una peluquería y una tienda de pintura se le unirá pronto la de la tienda del hogar Nuevo Diseño. A ello hay que sumar los cuatro empleados despedido por Ángel Aparicio, que tiene otras dos tiendas en la zona que está pensando cerrar. Para Aparicio, «no tienen en cuenta al pequeño comercio y al autónomo que también damos trabajos a muchas personas. No nos dan subvenciones, no ponen bolsas de aparcamientos cercanos no veo que estén pensando en nosotros». Uno de sus empleados, José Bernal, tacha los trabajos como «la gran obra faraónica, porque llevamos siete meses y a esto no le vemos fin».

Ayudas

Desde la Asociación de Comerciantes de San Fernando (Acosafe) se está intentando poner remedio a 0esta situación y ayer mismo su presidenta, Cristina Arjona, mantenía una reunión con la delegada de Innovación, Angelina Ortiz, en la que también estuvo el portavoz socialista, Fernando López Gil. De esta forma, el próximo 6 de mayo la delegada mantendrá en la ciudad una reunión de trabajo con los comerciantes isleños a quienes expondrá las distintas líneas de subvenciones a las que pueden acogerse. Además, se iniciará un trabajo individualizado con cada uno de los comerciantes que lo soliciten para así facilitarles y ayudarles en la consecución de las subvenciones.