Casi 300 niños ingresan al año en la UCI pediátrica del Puerta del Mar

Las principales causas de mortalidad infantil son los traumatismos por accidente doméstico o de tráfico. Los que ingresan en el hospital suelen hacerlo por fiebres altas y cuadros respiratorios.

Los datos los proporciona el doctor Sebastián Quintero, médico adjunto de la Unidad de Cuidados Intensivos Pediátricos del Hospital Puerta del Mar, que coordina el curso sobre emergencias en niños impartido en el Colegio Médico. Su área hospitalaria recibe al año entre 260 y 300 pacientes, un número que se mantiene constante, aunque podría verse reducido con una primera actuación precisa. En este caso, «lo que se haga en el momento inicial, que se conoce como la hora dorada, puede condicionar el pronóstico y la evolución del niño en el futuro», aseguró. Precisamente este curso, que comenzó ayer y dudará hasta el jueves, está orientado a médicos de familia y de urgencias extrahospitalarias.

«Las guardias en los centros de salud las hacen especialistas de Medicina Comunitaria y los servicios de emergencias tampoco incluyen a pediatras, con lo que deben recibir una formación completa ante el miedo que supone atender a un niño de pocos años». El doctor Quintero hizo hincapié en el manejo y estabilización de los dispositivos de shock pediátrico o el reconocimiento precoz de la sepsis -o inflamación- y la meningitis en las infecciones bacterianas graves, donde las primeras horas de actuación son claves.

La UCI pediátrica del Puerta del Mar cumple el próximo 2 de mayo veinte años. El área se desdobló para disponer de una unidad neonatal ante el aumento de niños prematuros y la mejor atención a los casos que se presentan. La Residencia también sirve de soporte de Cuidados Intensivos a las clínicas privadas de la capital que disponen de paritorio.