CCM reconoce que mantiene contactos con Unicaja y con otras entidades

El consejo de administración de Caja Castilla-La Mancha (CCM) reunido en la tarde de ayer en Toledo reconoció que está estudiando varias opciones de fusión o absorción con otras cajas de ahorros. El presidente de CCM, Juan Pedro Hernández Moltó, explicó que se seguirán estudiando «alternativas y situaciones con el objetivo de que CCM sea una entidad de futuro y sólida» y que «hay muchas alternativas y posibilidades, algunas conocidas y publicadas», en alusión a una posible unión de CCM con la malagueña Unicaja.

Hernández Moltó compareció ante los medios de comunicación para realizar una declaración institucional sin admitir preguntas al término de la reunión del consejo de administración de la entidad, reunido durante tres horas y media y al que no asistieron dos de los cuatro consejeros propuestos por el Partido Popular, que han dimitido.

Aunque en el orden del día no figuraba el asunto, el consejo había sido convocado de forma extraordinaria con motivo de las informaciones aparecidas sobre la posible fusión de CCM y Unicaja, avalada por los gobiernos Castilla-La Mancha y Andalucía.

También había interés por saber qué harían los cuatro consejeros propuestos por el PP después de que este partido les instara a dimitir en protesta por la falta de información recibida sobre la fusión y por la politización de la entidad. Finalmente, dos de ellos (Emilio Sanz y la alcaldesa de Ciudad Real, Rosa Romero) han dimitido y no acudieron a la cita, mientras los otros dos (Germán Chamón y Tomás Martín-Peñato) sí asistieron.

El presidente de CCM, flanqueado por los doce consejeros asistentes (incluidos los dos del PP), subrayó que la reunión tenía tan sólo carácter informativo, lanzó un mensaje de tranquilidad a los impositores y a los ahorradores de la caja y mostró su «malestar por una brutal campaña contra la imagen de CCM» que dura ya más de un año.

Precipitación

Recalcó el amplio acuerdo existente en el consejo sobre la conveniencia de «estudiar y seguir estudiando» situaciones, planteamientos, y alternativas con un objetivo fundamental: «que esta entidad sea de futuro, solida, con mucho desarrollo por delante». Se trata de hacer «un esfuerzo importante para dar un paso que nos sitúe en el futuro», para lo cual «hay muchas alternativas» y no se va a dejar de estudiar «ni una sola» de ellas con el objetivo de «seguir ganando espacio, seguridad y tranquilidad».

Hernández Moltó aprovechó su intervención para denunciar «la brutal campaña» que aprecia contra la Caja y para exigir respeto por una entidad que tiene un nivel de implicación y compromiso con un millón de clientes y 3.000 empleados. Moltó subrayó que el Consejo no tenía ni vocación ni posibilidad de llegar a acuerdos, sino tenía carácter informativo, y que fue convocado el lunes, el mismo día en que los presidentes de Castilla-La Mancha y Andalucía, José María Barreda y Manuel Chaves, se mostraron a favor de la fusión de CCM y Unicaja. A este respecto, explicó que la caja «no puede estar a expensas de rumores o afirmaciones» y reconoció que «otros ámbitos», como el político, no tienen la obligación de reserva que el consejo de una caja de ahorros pueda tener.