LA BOLSA

Una caída que no se veía en 135 años

El Ibex-35 se puso sus mejores galas para despedir el año. Arropado por el resto de índices europeos y de Wall Street, que también cotizaban al alza, el selectivo cerró la última jornada bursátil del año con una subida del 1,98%, para situarse en los 9.195 puntos. Sin embargo, el escaso maquillaje de esta última sesión, en la que apenas se movieron 1.200 millones de euros, no sirvió para aligerar el devastador saldo del fatídico 2008. En todo el ejercicio, el índice español cayó un 39,43%, la mayor caída desde que se creó en 1992 y el peor comportamiento de la Bolsa española desde hace 135 años.

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En un año marcado por la volatilidad, la incertidumbre, la crisis económica y los escándalos financieros, el Ibex sucumbió ante la desconfianza de unos inversores que han optado por salir en estampida de la Bolsa en busca de opciones ultraconservadoras. Así, el índice, que iniciaba 2008 en los 15.182 puntos, concluyó el año a duras penas por encima de los 9.000.

En la última sesión del año, no obstante, los inversores prefirieron obviar los malos datos económicos que siguieron sucediéndose en el mercado (en España, en particular, se conocieron los precios de compraventa de viviendas, que cayeron el 3% en el tercer trimestre del año con respecto al mismo periodo de 2007) y se fijaron más en la actitud proactiva de los Gobiernos, empeñados en poner fin a la crisis cuanto antes. Así, el Ibex contó con el apoyo de sus grandes títulos. Iberdrola fue el que más ganó, un 4,64%.