Un homenaje gastronómico

A estas alturas de las fiestas quien no ha cogido un kilillo de más es porque no ha celebrado como es debido la Navidad. Si ése es su caso, todavía está a tiempo de resarcirse y pegarse un homenaje para después eliminar lo que sobre. Para romper con la línea está José Antonio Moreno, que representa la tentación de los que intentan mantenerse en Navidad.

En el puesto 64 de la Plaza de Abastos lo pueden encontrar. Va con su mandil de carnicero de toda la vida. Que nadie espera un diablo matando moscas con el rabo.

Ya son bastantes los rellenos que nuestro protagonista ha preparado para estas fechas. «Bueno no nos podemos quejar, la verdad. Este año, quizá, ha sido más Navidades de berza y pucheros que de queso curado y de jamón de bellota», comenta. Una de las propuestas que más se llevan es el relleno. José Antonio, en su carnicería, lo tiene de cerdo o de ternera. «Se recubre con falda y dentro le ponemos un poco de carne picada, unos trozos de panceta, unos huevos duros y unos ricos piñones». Nos explica. Ha llegado la hora de cerrar, pero nuestro carnicero se va tomar una tapa en La Vega y va a volver al tajo. Hay que tener preparados los encargos que están apuntados en su libreta.

Personalizados

Qué usted no lo quiere con estos ingredientes, busque sus gustos y encárgueselo a José Antonio porque también hay rellenos personalizados. «Muchas personas lo quieren con pimientos del piquillo o con cualquier otro relleno. Pues nada, me traen los ingredientes y yo se lo relleno con mucho gusto», comenta con cierta gracia.

Si en la Nochebuena el pavo es el rey, en la Nochebuena es el relleno. Y después vendrán las uvas, las lentejas o la ropa interior que cada uno quiera ponerse, pero el relleno que no falte.

Y lo más ilusionante de todo, es que es un producto que se puede adquirir en cualquier fecha.

Pongan ustedes a prueba al bueno de José Antonio Moreno y pídanle un relleno para la fiesta de los Reyes Magos, verán como es posible. Si el lector buscaba una propuesta para la noche de fin de año, ahí la llevan. Para que después no digan que en los periódicos no se aportan ideas.