EL TRANVÍA

Un vehículo oficial con mucho recorrido

Resulta que Pilar Sánchez anunció que renuncia al Volvo S-80 que venía usando hasta ahora y aprovechó para lanzar un dardo envenenado a la portavoz de los populares, María José García-Pelayo. La acusó de ser la responsable del elevado coste que suponía el vehículo de marras, contratado por ella cuando era alcaldesa a través de un servicio de renting que había supuesto a las arcas municipales ya más de 60.000 euros.

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Más de uno posiblemente pensará que se trata de una chorrada, una cuestión menor en comparación de otros asuntos que deberían preocupar más a los políticos locales que si la alcaldesa se desplaza en un coche o en otro. Puede que sea así, aunque uno no puede evitar preguntarse que, si tan caro era ese vehículo -que personalmente pienso que sí-, ¿por qué no renunció antes a él? Porque hay que recordar que Pilar Sánchez lo ha empleado durante casi tres años para sus desplazamientos oficiales. Vamos, que un diez para la decisión pero un cero para la justificación.



RESPUESTAS PÚBLICAS



El director general de Binestar Social del Ayuntamiento anda molesto con quien suscribe. O al menos eso da a entender José Manuel Jiménez en una tribuna escrita en otro medio, a raiz de una serie de reportajes sobre los sin techo de la ciudad que el firmante de este espacio semanal escribió semanas atrás. Cabe destacar la corrección con la que Jiménez responde, aunque creo que se equivoca en los argumentos empleados y en el canal elegido.

Puede estar seguro que los trabajos a los que hace referencia fueron fruto de un recorrido de muchas horas por los puntos de la ciudad donde habitualmente hay sin techo o personas sin hogar -sé que no es lo mismo-. Simplemente se reflejaron sus vidas, sus situaciones y sus problemas, que son muchos, por cierto. Lo demás entra en el terreno de la subjetividad, y, como usted bien dice, cada uno tenemos la nuestra.

Le debo un e-mail, señor Jiménez.



EL EMBARGO DE LAS TAQUILLAS DEl XEREZ



El Juzgado de Primera Instancia número 2 ha nombrado un administrador judicial para que fiscalice las taquillas del club azulino. El objetivo, garantizar el pago de la deuda de 49.800 que, según afirma, mantiene la entidad con el ex jugador y ahora representante Gabriel Alejandro Nanini. Posiblemente el Xerez acabe pagando o llegando a un acuerdo con la otra parte antes de que el mencionado administrador ni tan siquiera pise las instalaciones de Chapín, pero, aún así, el hecho es un ejemplo más de lo rocambolesca situación del club.

El Xerez está institucionalmente decapitado. Está en manos de un señor que, aunque es cierto que hasta ahora no ha dejado al club en la estacada, ha repetido en multitud de ocasiones que está cansado y que está deseando venderlo. Pero nunca lo ha hecho, a pesar de la cantidad de ofertas recibidas y de las negociaciones «a punto de cerrarse».

Menos mal que en lo deportivo va todo muy bien, gracias a un entrenador, Esteban Vigo, y a una plantilla que han sabido aislarse de los problemas. El Xerez lidera la Segunda División y su juego alimenta los sueños de los más optimistas. Quizá Morales se haya contagiado de ese optimismo y vea en un posible ascenso la solución a todos los males. Sería un error, los problemas del Xerez son más profundos.