Infraestructuras y ahorro

a demoledora noticia de que más de medio millón de trabajadores perdieron su empleo en el mes de noviembre llevó ayer al presidente electo de EE.UU., Barack Obama, a anunciar un plan extraordinario de inversión en infraestructuras nuevas con el objetivo de crear dos millones y medio de puestos de trabajo para 2011, así como a poner en marcha medidas de ahorro energético, comenzando por los consumos que dependen directamente de las administraciones públicas. Es de suponer que para cuando se apliquen las iniciativas anunciadas, una vez que Obama tome posesión de la presidencia y pueda dictar los correspondientes decretos, el paro en dicho país rondará el 8%. Pero lo significativo del caso es que los males provocados por una supuesta sofisticación financiera hayan de combatirse con medidas tan convencionales.