Puesta de largo de LaLola

La calle Porvenir era, al filo de las diez de la noche, un hervidero de curiosos e invitados a la inauguración de LaLola, el nuevo local con vocación cultural de Antonio El Pipa, Juan José Padilla y David DeMaría. Mientras los vecinos se apostaban en los balcones, los tres jerezanos llegaron a su nuevo establecimiento entre los aplausos de la concurrencia. «Estamos haciendo realidad el sueño de muchos meses», aseguró el cantante y compositor jerezano con una copa de fino en la mano.

Tras el celebrado brindis y los flashes de las cámaras fotográficas, los tres amigos y sus parejas accedieron al remodelado edificio del siglo XVIII, que ya antes albergara otro conocido bar de copas de la ciudad, La Guarida del Ángel. Tras la reforma, LaLola dispone de 300 metros cuadrados divididos en tres alturas y una gran claraboya que deja ver el cielo estrellado por la noche y la luz del sol cuando es de día. Con la nueva distribución, el local ha ganado en amplitud y claridad. La decoración es otro de los signos de identidad de LaLola. Además de varias fotografías de Lola Flores -a quien homenajean con el nombre del local- en las paredes hay objetos tan valiosos como la primera guitarra de David DeMaría o el primer traje de baile de El Pipa. «Queremos que todo el mundo se sienta como en casa», aseguró el torero jerezano. «Lola es el nombre de la mujer jerezana y queríamos homenajear a la que es fuente de inspiración para los artistas», añadió El Pipa. Además, según apuntó DeMaría a su llegada al local, la familia Flores está al corriente de este homenaje a la Faraona y «están muy orgullosos».

Invitados

La expectación era lógica la noche del viernes a las puertas de LaLola, puesto que eran muchos los nombres de artistas que se habían rumoreado en la ciudad como posibles asistentes a la inauguración de este establecimiento con clara inclinación artística. Finalmente, los jerezanos estuvieron acompañados por el torero Finito de Córdoba y su mujer, Arancha del Sol, y otros artistas locales como Ezequiel Benítez, María José Santiago o Vicente Soto Sordera. A la entrada al local -sólo se podía acceder ayer mediante invitación y desde hoy se abrirá al público a primeras horas de la tarde- las mujeres recibieron un obsequio y un clavel rojo.

«En LaLola sólo va a sonar música en español», aseguraron sus dueños. «Se va a convertir en un punto de encuentro. Ya tenemos un sitio de donde no nos van a echar», dijeron entre risas mientras saludaban a diestro y siniestro a los que se acercaban a felicitarlos por su iniciativa. «Teníamos esta inquietud y, si finalmente lo hacíamos, tenía que ser en Jerez», añadieron con orgullo.

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