El San Fernando viaja a Écija muy mermado por las ausencias

Delfín Cañas tiene una habilidad comparable a la de ciertos superhéroes. Se está cargando al San Fernando desde la distancia. Los cientos de kilómetros que le separan de La Isla no son impedimento para que su maléfica influencia haya destrozado a un conjunto de jugadores que hasta hace bien poco funcionaba como una máquina perfectamente engrasada.

Con la puesta en escena del monstruo de los problemas económicos, que era como el psicópata de las películas que primero asusta y, luego, mata, los azulinos llevan seis partidos sin ganar. Desde el 5 de octubre no logran los isleños sumar tres puntos de un tirón a su casillero, cuando ganaron al Poli Ejido.

La visita al Municipal de San Pablo, otrora un fortín, puede ser la oportunidad que necesita el San Fernando para lograr una victoria balsámica, que vuelva a unir las piezas rotas y aleje al fantasma de Delfín Cañas y sus pagarés de destrucción masiva.

Antonio Iriondo puede dar la sorpresa y poner de inicio al portero Luis Lorente en detrimento de Raúl Iglesias, muy fallón en los últimos partidos. Además, las sanciones han dejado al San Fernando en cuadro. Porto, roja directa, Regino y Javi Casares, doble amarilla, y Marco, quinta cartulina, todas vistas ante el Conquense, causarán baja, por lo que Iriondo tendrá que hacer encaje de bolillos para reconstruir el once titular. Con estos mimbres, lo más probable es que el técnico isleño saque una defensa de tres centrales, formada por Germán, Selu y Wicha.

El Écija, tras perder por la mínima ante el Cádiz, está obligado a ganar para dejar la zona de descenso. Los astigitanos, que siguen sin acumular dos triunfos consecutivos, no pueden perder la ocasión para acabar la semana con una alegría que les ayudaría a despegarse un poco más de las últimas cuatro plazas. Para el choque con los isleños son bajas en el plantel astigitano Aitor Ramos, Raúl Pichardo y Jesús.